"La gente no sabe si somos una tienda de guitarras o un restaurante". Esa es la gran incógnita de Bosco, el local situado en la calle Fernández de la Hoz, 78, en Nuevos Ministerios, porque realmente es ambas cosas. Desde 1980 ha sido la tienda conocida como la "meca de los instrumentos", dice uno de sus actuales dueños, Dan Dapena, hijo de Johnny, el fundador de Bosco.
A los familiares de Johnny, que recientemente se ha jubilado, les daba pena cerrar su tienda de música después de haber pasado por ella todos los artistas nacionales y grandes celebridades internacionales como Los Ramones o Jim Marshall, el creador de los altavoces y el equipo musical con su nombre.
Así, teniendo muy en cuenta su pasado, reabre Bosco convertido en un nuevo restaurante con conciertos en vivo. Madrid Total ha sido el primero en visitarlo tras este regreso y ha charlado con Johnny Dapena, que puede presumir de haberle dado una guitarra a todos los artistas de la Movida madrileña en su tienda. Formaba con su mujer el dúo 'Ana y Johnny', que en el 76 llegó a meterse en las listas de los números uno de todo el país. "Un éxito que no se alarga mucho en el tiempo porque empezamos a formar una familia y en los ochenta empezamos a alquilar nuestro equipo a Sabina, Los Pecos, la camarilla de Camilo Sexto, Victor Manuel, Ana Belén, etc. Y de ahí surge la idea de crear una tienda con equipo musical", cuenta el propio Johnny.
Muchos también compraron su primera guitarra allí: "Luis Guerra, Santana y no solo artistas, aficionados como la infanta Cristina, alcaldes de Madrid y demás políticos", añade Johnny, y es que no hay persona del panorama musical que no haya pasado por este local.
Abierto hace solo un mes, Bosco no se ha dado a conocer con su nuevo lavado de cara y todavía entra gente preguntando por material musical. Al fin y al cabo, la tienda sigue. Todos los instrumentos que decoran el restaurante se venden.
Un local que confunde, pues la entrada conserva un mostrador en el que siguen despachando material musical. Una "confusión sana", matiza Dapena, "para homenajear la tienda".
Una vez en su interior, la decoración es bastante recargada pero exquisita con todas las paredes repletas de guitarras eléctricas y el techo lleno de platillos de baterías acompañado de telones de teatro junto a una barra y mesas de piedra de diferentes países clasificadas como raras. En su conjunto forman un restaurante con una iluminación de sala de concierto en la que todo, hasta la sala VIP, está diseñada para que todas las miradas se posen en el escenario.
Bosco, que abre todos los días y ofrece comidas y cenas, busca que sobre el escenario haya una música que amenice el encuentro, como un arpa o un piano, y después de la comida empiece un concierto para que la gente lo acompañe con un cóctel y baile.
Conciertos, series y entrevistas de "grandes amigos"
El nuevo Bosco busca ser más "un local cultural en el que todos los días haya un concierto", dice Teresa Martín, también propietaria y familiar de Johnny. En ese aspecto, juegan con ventaja, puesto que todos los artistas conocen la tienda.
De esta manera, muchos lo recuerdan con un especial cariño y no les importa volver a tocar. "Estamos trayendo artistas de todo tipo, sobre todo antiguos y grandes amigos de la Movida madrileña. Es un sitio de culto a la música: electrónica, flamenco, jazz… De todo", concluye Martín.
Sin ir más lejos, esta semana tocan en su local Simon & Francis, con un tributo a The Beatles, y tienen confirmado al batería de Los Secretos.
También están preparando entrevistas a cantantes e incluso una serie de televisión al grupo Tobogán con el restaurante como plató principal para cerrar la oferta cultural.
Su programa de conciertos se puede consultar en su Instagram y pronto lanzarán su web. Puedes ir sin reserva, aunque es recomendable hacerlo.
Cocina mediterránea de fusión
De la música a la cocina. "Teníamos claro que queríamos ofrecer el mejor producto para tener una experiencia placentera completa, no solo a la hora de escuchar música", dice Dapena. Por eso han contado con el chef Salvatore Corradino, procedente de Mamá Chicó en el Paseo de Recoletos, con el que han creado una carta estilo americano junto con cocina mediterránea fusión.
A falta de recibir el horno de leña y un wok para ampliar la carta y crear menús cerrados, explican, los precios rondan los 40 y 55 euros.
Además cuentan con una carta de cócteles personalizada por David González, jefe de cocina de DiverXO, con vasos tematizados con forma de instrumentos como guitarras, saxofones o altavoces.
[El nuevo StreetXO de Dabiz Muñoz abre este jueves 19 de enero]
Un reservado para firmar contratos discográficos
Al llegar a la tienda, si vas al reservado, tendrás que decir la contraseña que te hayan dado al dependiente que estará en la entrada y tienda. Es un clásico rockero que lleva toda su vida tras el mostrador. "ACDC, Queen o algún grupo", es la idea de Dapena. De ahí lo acompañará a la segunda planta, no sin antes pasar por una puerta secreta cubierta por correas de guitarras y unas escaleras empapeladas con Melody Maker, la revista de rock más antigua del mundo, creada en 1926, incluso antes que Rolling Stone. Ediciones originales con los que, a través de coleccionistas, han conseguido forrar las paredes.
El reservado, una amplia sala con baño propio y vistas al restaurante desde lo alto, simula los despachos y salas de reuniones de las discográficas donde se firman los grandes tratos musicales.
Bosco, el primer equipo americano
El nombre de Bosco también tiene su historia. El primer equipo de música que llegó a España de la base americana de la marca Bose Company fue a la tienda de Johnny. Un hito para ellos que les hizo merecedores de llamar así a la tienda. Empezaron a desvariar con el nombre y todo quedó en Bosco. Llegaron a tener seis tiendas repartidas por toda España hasta la crisis del 2008.
Por el momento, el restaurante sigue vendiendo en su pequeña tienda, pero busca hacerse un hueco en la gastronomía madrileña. "Seguimos vendiendo a antiguos clientes. Hay guitarras de todos los precios a partir de los 150 euros que la gente que venga a cenar podrá comprar si quiere", informa Dapena.