Cuando Eugenio Arias se exilió en Vallauris, al sur de Francia, no sabía que su vida y la de su localidad (Buitrago de Lozoya) estaban a punto de cambiar para siempre. Su relación con Picasso, del que fue barbero durante los últimos 25 años de la vida del artista, le aportó un precioso presente: una colección de obras del pintor que el ilustre vecino donó al municipio.
La generosa donación se convirtió, en 1985, en un pequeño museo que, precisamente coincidiendo con el 50 aniversario de la muerte del artista, va a reforzar su apuesta por la cultura en este pequeño municipio madrileño.
Hasta ahora, la colección de obras de Picasso ha estado ubicada en algunas salas del Ayuntamiento de Buitrago del Lozoya. Dibujos, obra gráfica, fotografía, cerámicas, pirograbado y un cagafierro, así como carteles de exposiciones y libros dedicados del artista a Eugenio Arias, se amontonaban en un sótano inaccesible para personas con movilidad reducida que no permitía exponer el potencial de la colección.
Ahora, la Comunidad de Madrid ha anunciado que va a renovar íntegramente el Museo Picasso de Buitrago del Lozoya. Ampliará sus instalaciones en un nuevo edificio histórico gracias a una inversión "inicial" de 1,8 millones de euros, que se incrementará conforme a las demandas del proyecto.
La empresa pública Planifica Madrid será la encargada de la ejecución de esta obra de excepcional interés público tanto para la localidad como para toda la región. Desde la misma nos han confirmado que la idea es crear un espacio más amplio y 100% accesible.
Habrá diferentes espacios dedicados no sólo a la exposición de las obras. También habrá cabida para el amplio fondo bibliográfico sobre el genio del cubismo que Buitrago de Lozoya ha ido atesorando con el paso del tiempo.
Para su localización, la Comunidad de Madrid ha querido salir de los sótanos del Ayuntamiento municipal y darle un espacio propio. Concretamente, un edificio protegido con esgrafiado segoviano que se encuentra en la misma plaza del Ayuntamiento.
En la sala principal, el museo recogerá las 79 obras que pertenecieron al peluquero del pintor y que fue recopilando a lo largo de sus años de amistad. Esa será la zona dedicada a la exposición permanente y será lo primero que vea el visitante.
Además, en la parte superior del edificio habrá un centro de documentación, investigación y producción con los numerosos fondos bibliográficos sobre Picasso. Por la distribución, allí también se ubicará un área para la realización de actividades culturales y educativas.
Según ha informado Planifica Madrid a Madrid Total, se está haciendo un concurso público por lo que los tiempos no son "inmediatos".
En estos momentos han sacado a licitación el proyecto con las bases indicadas (las salas diferenciadas, los espacios, etc). Se estima que la rehabilitación va a durar dos años. "Calculamos adjudicarlo en verano".
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En lo que respecta al presupuesto, indican que aunque desde la empresa pública se van a invertir 1,8 millones de euros, a eso hay que sumarle vestir el museo. Algo que depende de Cultural.
El edificio a rehabilitar tiene dos plantas con una superficie total de 460 metros cuadrados. Se mantendrá exclusivamente la fachada que será debidamente restaurada, recuperando el acabado de esgrafiado segoviano.
El actual museo aumentará su superficie hasta los 430 metros cuadrados, 100% accesibles para personas con movilidad reducida gracias a un ascensor que comunique la zona de acogida, el centro de documentación y la exposición permanente.
Primer museo regional
La historia del Museo de Picasso de Buitrago de Lozoya es especialmente llamativa no sólo por la proveniencia de las obras, también por su importancia para la Comunidad de Madrid.
El barbero donó los regalos que el artista le hizo a la Diputación de Madrid con la única condición de exhibirse en su pueblo natal. De esta forma, la Comunidad de Madrid se vio 'obligada' a levantar el primer museo creado y abierto por la región.
Desde 1985 hasta ahora han pasado muchas cosas y el centro se ha quedado pequeño. Tras la pandemia, explican desde el municipio, el número de visitantes se ha potenciado. "Por eso del turismo rural, descubrimos nuestras joyas".
Para adaptarse a su afluencia de público han aumentado sus dimensiones y esto, además, les permite cumplir con las actuales exigencias de accesibilidad. El museo tampoco tiene zonas de aseos y, cuando hay mucha cola, "la gente tiene que esperar en la calle".
El inmueble elegido por el consistorio es la casa del esgrafiado y se encuentra situada en la misma plaza de Picasso, en el corazón del municipio, cruzando la calle desde el emplazamiento actual, y muy cerca de donde se encontraba la barbería de Eugenio Arias.