Suben las temperaturas, sale el sol y los puestos y tiendas de helados abren sus puertas en Madrid. Una mezcla de sabores al paladar de lo más refrescante a la que este verano los niños no están invitados.
En esta ocasión llega a la capital un nuevo sabor que no pueden comer ni niños ni adolescentes, y es el lanzamiento del primer helado de Nordés Gin elaborado de manera artesanal en colaboración con la conocida cadena de heladerías madrileña Mistura, que ha realizado una reinterpretación única del sabor suave y aromático de la ginebra premium de origen gallego, con un helado de graduación del 6% de alcohol, parecido a la de una cerveza.
Helado de Nordés.
Este nuevo sabor, que sólo estará este verano, hasta el 31 de agosto, lo puedes probar en tres heladerías en la capital. Estará disponible con los precios habituales de Mistura en su tienda de La Latina (calle de Toledo, 71) y en el Mercado de San Antón, en su heladería y 11 Nudos Terraza Nordés.
El helado de Nordés Gin, de edición limitada, estará de forma temporal en formato cono y a elegir los tres tamaños de tarrina. Este sabor es apto para veganos y se elabora de manera totalmente artesanal.
Helados hechos a -20º
Cada día, los helados de Mistura se elaboran en su propio obrador para trabajarlos después en una plancha de cuarzo a -20º, donde el helado se trabaja con dos espátulas, lo que permite que el producto conserve su temperatura exacta en el proceso, sus propiedades y se trabaje mejor. En esta plancha, se pueden añadir toppings como frutas frescas, cookies o caramelo.
Cada día, elaboran entre 15 y 18 sabores que se pueden combinar, entre los que destacan clásicos como el chocolate, la fresa o la vainilla y ahora, también, este nuevo sabor a ginebra.
El helado en tarrina terminado con una banderilla de uvas y la botella de la ginebra Nordés.
¿A qué sabe?
El sabor refrescante de Nordés está presente desde la primera vez que se prueba y perdura en boca mientras se disfruta del helado que incluye todos los matices de los botánicos característicos de esta marca de ginebras, perteneciente al grupo Osborne. Cada helado se corona con una brocheta de uvas blancas para recordar la base vínica de uva de Albariño de la ginebra y que además le aporta un toque dulce.
Su elaboración comienza por preparar la base del helado, compuesta por agua y azúcares que se mezclan hasta conseguir una masa líquida uniforme. Esta base se pasteuriza para eliminar agentes patógenos pero sin perder las propiedades de sus elementos naturales.
A continuación, añaden la ginebra que se bate lentamente durante horas y va adquiriendo aire de manera natural. Un proceso de maceración donde todos los elementos confluyen de manera perfecta y orgánica con la ginebra, que aporta una graduación del 6% de alcohol al helado, una cantidad menor que la de una copa de vino o un gintonic y similar a la de una cerveza. Finalmente, la preparación se solidifica durante la mantecación, un centrifugado con aspas que giran a gran velocidad dentro de un cilindro cuyas paredes están congeladas.
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Este verano podrás probar en Madrid un sabor fresco y aromático, ideal para disfrutar de los placeres gourmet de la vida, pero esta vez de una forma más refrescante, y eso sí, no apta para menos de 18 años.