Nunca antes se ha visitado Pompeya a través de los ojos de un ciudadano que la habitó cuando ocurrió la catástrofe 2.000 años atrás. La ciudad de la antigüedad más famosa de la historia, destruida y sepultada por la erupción del Vesubio en el año 79 de nuestra era, es la protagonista de la nueva exposición inmersiva 'Los últimos días de Pompeya' en Matadero Madrid.
Sus proyecciones virtuales son tan reales que no podrás evitar instintivamente inclinar el cuerpo para esquivar las bolas de lava que volaron por el cielo durante la erupción o pestañear para impedir que penetre el denso humo del volcán en tus ojos. Estas son algunas de las reacciones que te despertará esta nueva experiencia inmersiva que podrás vivir desde este viernes 8 de septiembre y en la que te sentirás como un pompeyano.
El final de esta urbe romana, que terminó con 1.047 muertos encontrados, fue tan trágico, que a día de hoy impacta su historia, y más lo hará cuando te sumerjas de lleno en ella a través de la realidad virtual. Una nueva exposición que se podrá visitar hasta el 15 de octubre.
Con las gafas de realidad virtual visitas el interior de una domus romana.
El visitante sentirá que camina por las calles de la vieja ciudad romana instantes antes de la exposición del Vesubio y se sorprenderá con la sofisticación de las antiguas domus, las casas de los nobles.
Cadáveres sepultados
'Los últimos días de Pompeya' consta de cuatro espacios. En su Sala Expositiva muestra objetos y piezas arqueológicas pertenecientes a los diferentes museos romanos llegados desde Nápoles que permitirán retrotraerte a ese momento de otoño del año 79. Entre estas piezas está la 'Cabeza monumental de Osuna' realizada en mármol blanco, un libro, vasijas y varios utensilios femeninos.
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La sala se completa con los dramáticos calcos de yeso sacados de los cadáveres sepultados bajo las cenizas del volcán, que están iluminados a través de un sistema de video mapping. Estos moldes han permitido conservar detalles fieles de los rostros y cristalizar los últimos momentos de los pompeyanos fallecidos.
La Sala Expositiva muestra moldes de yeso sacados de los cadáveres de Pompeya.
El visitante, el protagonista
En cambio, en el resto de la muestra es el visitante el que coge el papel principal y protagoniza la vivencia. "Está a mitad de camino de una experiencia museográfica y una experiencia cinematográfica", informa el productor ejecutivo de la exposición, Jordi Sellas a Madrid Total el día de su presentación.
La Sala Inmersiva, un impresionante espacio de 1.200 metros cuadrados de proyección en el que las paredes y el suelo te transportan a la antigua ciudad. Por ella harás un recorrido por sus calzadas de piedra, las domus y también por las entrañas del volcán para conocer las fuerzas magmáticas y las claves previas a la erupción.
Aun así, la Sala Metaverso es la joya de la exposición, según indican desde Madrid Artes Digitales, los creadores de la exposición. "Es algo que nunca se ha hecho y es una satisfacción ver las caras de sorpresa de los visitantes al terminar la experiencia", indica el productor Sellas.
Momento de la simulación de la erupción del Vesubio en la Sala Inmersiva.
Y es que el espectador se convierte en un avatar digital que camina libremente por la famosa 'Villa de los Misterios'. Con unas gafas de realidad virtual puedes recorrer todos los rincones de la lujosa domus, desde sus termas hasta las cocinas donde los esclavos preparaban los banquetes.
Finalmente, en la 'Sala de Realidad Virtual' más grande de Europa (50 sillas giratorias con gafas y auriculares) disfrutarás junto con el resto de pompeyanos de su entretenimiento favorito en el anfiteatro: la lucha de gladiadores, carreras de cuadrigas y naumaquia (batalla naval en el centro del anfiteatro).
El precio va desde los 12,40 euros (el día del espectador, el lunes) a los 21,40 euros, la entrada general. Las experiencias inmersivas duran entre 6 y 8 minutos y la emisión de la Sala Inmersiva es de 20 minutos.
La 'Sala de Realidad Virtual' más grande de Europa (50 sillas giratorias con gafas y auriculares).
La Nave 16 de Matadero exhibe durante cinco semanas los resultados del trabajo de 200 personas que durante 2 años ha creado una exposición única en la que los cinco sentidos redescubren Pompeya.