El bistró más parisino de Madrid, el café del Nuncio.

El bistró más parisino de Madrid, el café del Nuncio. E. E.

Ocio

Así es el café más parisino de Madrid que recupera su nombre junto a una de las escalinatas más bonitas

Este local, ubicado en un lugar mágico del centro de Madrid, es perfecto tanto para desayunar como para tomar un aperitivo o un cóctel a mitad de tarde. 

31 diciembre, 2023 19:58

Este mítico café que lleva más de 140 años viendo pasar la vida en Madrid ha sido siempre uno de los locales más románticos de la capital. Situado en un entorno único, en la esquina de la calle de Segovia con la Travesía del Nuncio, su decoración al más puro estilo de bistró parisino y su esencia decimonónica le dieron fama desde siempre.

El Café del Nuncio.

El Café del Nuncio. E. E.

Durante más de un siglo, ha sido el lugar elegido por muchos madrileños y turistas para tomar un café, unos vinos, para una tranquila cena en pareja... y ahora también para disfrutar un cóctel en los famosos tardeos que están ganando adeptos en la capital.

Además, la nueva responsable de la coctelería del local, Valentina López, ha apostado por mantener los tragos de toda la vida mezclados con nuevos sabores y nuevas apuestas que es justo lo que quiere volver a ser este bistró: un café de toda la vida con una cocina nueva y muy apetecible.

De hecho, lo primero que ha hecho su nuevo propietario, Xavier Saludes Prada, es recuperar el nombre que le dio fama durante décadas, el Café del Nuncio, y dejarse de bautizos extraños ni de fórmulas modernas. Este empresario y sumiller también ha incluido entre las paredes del histórico bistró una refinada vinoteca para completar esa esencia afrancesada de los cafés históricos con la mejor materia prima y opciones para todos los gustos: blancos tranquilos, generosos, tintos y espumosos.

Uno de los cócteles que ofrece el Café del Nuncio.

Uno de los cócteles que ofrece el Café del Nuncio. E. E.

El local, encajonado entre callejuelas y bordeando una de las escalinatas más bonitas de Madrid y de las más fotografiadas del centro, se convierte, pese a estar en pleno barrio de los Austrias, en un remanso de paz desde la mañana a la noche para ofrecer desayunos, brunch, comidas, meriendas y riquísimas cenas.

Como el auténtico café que es, ofrece a sus clientes variedades de todo tipo: desde el bombón, el famoso barraquito canario, el asiático, un blanco y negro, el café María, el jamaicano con ron y el irlandés con un estupendo whisky. También cuenta con una carta de hasta ocho infusiones para los que huyen de la cafeína.

En cualquier momento, se pueden completar estas tazas con tartas caseras de zanahoria, de queso, bizcocho al limón y el ya famoso tiramisú casero Café del Nuncio.

Si optamos por empezar directamente con unos aperitivos, están los inspirados en el norte de España como la lata de mejillones en escabeche casero con patatas fritas, los berberechos al natural de las rías gallegas o unas anchoas o sardinillas del Cantábrico con pan con tomate, siempre maridados con un rico vino blanco.

El plato del tuétano del Café del Nuncio.

El plato del tuétano del Café del Nuncio. E. E.

Podemos seguir con platos puramente castizos como los callos, las patatas bravas Café del Nuncio o la ensaladilla rusa casera Oliviere, con un especial toque de autor.

Y entre las opciones principales, la carne es la protagonista del menú sobre todo con el steak tartare de lomo bajo al estilo del Café del Nuncio o el tuétano de ternera asado con steak tartare de lomo bajo, que son dos de las opciones más demandadas del local.

Los sábados, domingos y festivos, el mediodía se convierte en un momento mágico porque tanto en la terraza como en el interior se puede disfrutar de un brunch que incluye café arábica 100%, zumo de naranja, bollería, fruta, una copa de vino y un sándwich o hamburguesa y por sólo 20 euros. 

Una bonita hora para comprobar que El Nuncio vuelve a ser El Nuncio vayas a la hora que vayas.