Desde el viernes 16 de febrero, Madrid va a ser invadida por gigantes y alargadas estatuas que ya han visto pasar a millones de transeúntes en Estados Unidos.
Su creador es Santi Flores, conocido como el artífice del metal, un polifacético artista nacido en Albacete que se ha dedicado sobre todo a la escultura, pero también ha pasado por las profesiones de músico, profesor de arte, pintor, etc.
Tras su paso por la avenida de Broadway de Nueva York, donde sus esculturas formaron parte de la ciudad durante seis meses, el artista Flores continúa con su propuesta de realizar simultáneamente exposición urbana y en sala.
Las esculturas de gran tamaño, que representan a personas con la mano levantada, estarán expuestas en diferentes puntos del cultural y céntrico Barrio de las Letras de la capital desde esta semana.
Con el reciente ejemplo de Las Meninas, que consiguieron tanta fama que estuvieron por las calles de Madrid hasta dos años, promete ser la nueva exposición callejera de moda. Las obras estarán en el centro de la capital a lo largo de dos meses.
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Según informa el artista Santi Flores en sus redes sociales, esta semana inaugura dos exposiciones en la capital. Una de ellas será urbana, ocupando así sus obras todo el céntrico barrio, y la otra, en lo que será su galería y estudio por unos meses, Galería Nueva, en una de las calles situadas detrás del Museo Reina Sofía, donde expondrá su obra 'Solitud'.
El artista instalará 13 de sus esculturas en las plazas del Barrio de las Letras de Madrid. Obras de gran formato, 4,5 metros de altura, creadas en acero inoxidable, serán colocadas en diferentes ubicaciones.
Las esculturas del artista las vas a poder encontrar en la Plaza de Santa Ana (calle del Príncipe), junto a Serrería Belga (esquina calle Alameda con Almadén), en la Plaza de Platerías (Paseo del Prado), en la Plaza de las Cortes (junto al Congreso de los Diputados), en el exterior del Estudio Galería Santi Flores (calle San Agustín, 14) y en el cruce con la calle Sevilla y Alcalá (junto al Four Seasons Hotel).
Las esculturas, según está explicado en la web del artista, son "una desproporcionada mano alzada" y "tiene el propósito de llamar la atención del espectador con lo que es para el artista un gesto de reafirmación del individuo a la vez que el deseo de pertenencia al colectivo". Sus diferentes colores, así como los característicos grafismos, hacen que cada una de las obras sean tan únicas como el ser humano.
Hace dos años, casi una quincena de esculturas de gran tamaño con manos levantadas brindaban una cálida bienvenida a los neoyorquinos, ahora lo hacen en Madrid, de la mano de Santi Flores, el albaceteño que también ha expuesto sus obras en diferentes ciudades de España, Berlín y Roma.