Si la entrega de la Medalla Internacional de la Comunidad de Madrid por parte de Isabel Díaz Ayuso a Javier Milei provocó reacciones de todo tipo en la región y al otro lado del océano, ahora es la oposición argentina la que desembarca en Madrid con mucho sabor, mucho asado y las ideas bien claras.
"No hay ningún motivo por el cual a Milei nadie pueda darle una medalla de nada. Todavía no hizo historia. Todo lo contrario, está destruyendo al pueblo argentino y las relaciones internacionales", opinan los hosteleros peronistas que acaban de aterrizar en la capital con un restaurante que promete convertirse en un lugar único.
Todo tiene una importancia simbólica en Perón-Perón, como se llama el asador, hasta la fecha de apertura: este viernes 26 de julio, cuando se cumplen 72 años de la muerte de la esposa del dirigente. "El día que Evita —Perón— pasa a la inmortalidad", insiste el responsable del nuevo vecino del barrio de Malasaña.
El artista muralista Juan Danna pitando a Maradona.
El restaurante llega a España tras haberse convertido en un lugar emblemático en Argentina, según informa su fundador, el argentino Daniel Narezo, militante del partido peronista desde los 12 años.
Este trocito de Argentina, que combina la tradición culinaria del país con la historia y vida del peronismo, abre en la calle Pez, número 6. Concretamente en lo que fue anteriormente El Pez Gordo, propiedad de Santiago Buzo, quien es ahora socio de los hosteleros argentinos.
En expansión
Perón-Perón nació al otro lado del Atlántico hace 14 años de la mano de antiguos militantes peronistas, la corriente política que creó en la década de los 40 Juan Domingo Perón, presidente de Argentina en dos ocasiones. Entre sus paredes se habla de los derechos de los trabajadores, la justicia social, el cuidado de los sectores más vulnerables y feminismo.
"Quería hacer una unidad básica —es como le llaman en Argentina al centro social de los simpatizantes de un partido— pero preferí poner en discusión el peronismo en las tabernas. La idea es emular a los bares del siglo XIX en los que se debatía de arte, filosofía, política, etc.", explica su creador.
Altar de Evita Perón en el restaurante Perón-Perón.
La apertura de Madrid es la cuarta de la cadena, marcando el inicio de una ambiciosa expansión internacional. Y es que Perón-Perón cuenta ya con tres locales en Argentina: dos en Buenos Aires, Palermo y San Telmo, y otro en Córdoba. Además, pronto abrirán otro en Lanús.
Elegir la capital de España como el punto de partida para su expansión internacional no es casualidad. "Cuando derrocan a Perón en el golpe de Estado, se exilia en Madrid, donde pasa 18 años", explica Daniel.
Con esta imagen del matrimonio Perón en la capital, este restaurante quiere convertirse en un puente cultural entre España y Argentina, y en un lugar de encuentro y de debate para los amantes de la gastronomía.
"Milei dice que es Terminator y se dedica a destruir las relaciones fraternales, pero los peronistas venimos a afianzar los vínculos sociales y culturales con España, que tenemos muchos", opinan desde Perón-Perón.
Perón-Perón tiene su toque español con tapas y gastronomía típica de aquí.
Todo huele y sabe a peronismo en este local con una decoración y ambientación fuertemente alineada con la simbología de esta corriente política. La imagen de Eva Duarte está pintada en la puerta y cuenta con murales, imágenes y frases emblemáticas peronistas, y hasta una iconografía de Diego Maradona.
El halo artístico, cultural y bohemio está impregnado en los murales y bóvedas, realizados por el artista Juan Danna, en colaboración con Suyay Brilliau, ofreciendo una experiencia visual impactante.
Comida argentina
El jefe de cocina de los locales de Argentina, Lucas Winkelmann, ha formado a los integrantes de la cocina de Madrid, entre ellos, al fileteador Facundo Leguizamón, para que el restaurante mantenga la idiosincrasia de la marca, evocando a la época peronista en todo su esplendor a través de la gastronomía.
En la carta hay platos típicos como las milanesas, el osobuco con ocho carnes, el choripán o el pastel de papas, "el preferido de Perón". También tiene su toque español con tapas y gastronomía madrileña.
Además, cuentan con un menú Perón-Perón que incluye platos con nombres que no dejan ninguna duda de dónde nos encontramos: A poner el pecho, La Gloriosa y Dos Potencias se Saludan.
El ticket medio de este templo del peronismo en Madrid es de 35 euros por persona y abre en servicio de comidas y cenas, aunque cerrará a las dos de la madrugada con música y cócteles, como el argentino Fernet con coca.
Frente al mural de Maradona del restaurante, Juan Danna, Daniel Narezo, Facundo Leguizamón y Lucas Winkelmann, de izquierda a derecha.
El nuevo lugar de encuentro y debate en Malasaña tiene una previsión de recibir hasta a 4.500 comensales mensuales y planean abrir también en Barcelona, Málaga, Valencia, y, en un futuro, en Roma, París y Nueva York.