Borja Sánchez
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España es un país que cada vez es más conocido por la belleza de sus pueblos. Y una de las regiones más famosas es la Comunidad de Madrid, donde podemos hallar diferentes rincones que se han convertido en los más bellos del país, perfectos para una escapada de unos días ahora que el verano ya se ha esfumado. 

Con la llegada del otoño, muchos paisajes mutan su belleza, vistiéndose de tonos amarillentos, marrones y pardos. Sin embargo, las múltiples posibilidades que tenemos en las proximidades de la capital aumentan cuando visitamos algunos de los pueblos más bonitos que hay en las comunidades colindantes. 

Uno de los mayores ejemplos es Castilla-La Mancha, donde podemos encontrar parajes tan bonitos y espectaculares como Sigüenza. Este municipio, conocido por ser uno de los más bellos de España, va camino de ser declarado Patrimonio de la Humanidad. Sin embargo, el motivo de este nombramiento es de lo más curioso, ya que se debe a una particularidad que sólo se presenta en este pequeño rincón situado a poco más de una hora de Madrid. 

Este pueblo, que cuenta con una gran historia detrás, ha sido lugar clave de muchas rutas comerciales en la antigüedad. Además, destaca por tener enormes maravillas escondidas como su impresionante castillo medieval y que ahora ha sido convertido en un lujoso Parador Nacional

Por si esto fuera poco, este idílico municipio cuenta con varios monumentos que ensalzan su valor, destacando también la belleza de sus estrechas y empedradas calles. Así pues, Sigüenza es sin duda el lugar perfecto para perderse y para pasar unos días de descanso mientras se disfruta de la naturaleza y de todas sus maravillas. 

¿Por qué Sigüenza puede ser declarado Patrimonio de la Humanidad?

Sigüenza es un pequeño municipio situado en la provincia de Guadalajara que tiene poco más de 4.300 habitantes. Sin embargo, a lo largo de todo el año, cuenta con miles y miles de visitantes que se aproximan hasta estas tierras de la comarca de la Serranía para disfrutar de todas sus maravillas. 

Por ello, es uno de los pueblos más turísticos de toda España. Además, ahora que llega el otoño, se produce uno de los mejores momentos del año para poder admirar su majestuosidad. Otra de sus grandes ventajas es que está a unos 140 kilómetros de Madrid, por lo que podremos llegar en coche desde la capital en poco más de una hora. 

Una panorámica de Sigüenza (Guadalajara). Visita Sigüenza

Este factor hace que aumente ostensiblemente el número de turistas durante los fines de semana en los que hace buen tiempo. Sin embargo, Sigüenza se encuentra de enhorabuena en estos momentos porque está muy cerca de recibir un importante reconocimiento: ser considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. 

De recibirlo, este pequeño rincón de Castilla-La Mancha con casi un milenio de historia podría disparar sus niveles de turismo y, a su vez, de riqueza. El motivo por el que pelea por este honor es porque a tan sólo 15 kilómetros de su centro se encuentran las Salinas de Imón, un complejo que ha sido recientemente incluido en la candidatura de 'Paisaje Dulce y Salado de Sigüenza-Atienza' para el reconocimiento de la UNESCO. 

Datan del siglo X y fueron cruciales para la producción de sal en España hasta 1996. Estas salinas cuentan con una arquitectura tradicional propia y representan gran parte de la herencia cultural de la región. Además, el programa 'Paisaje dulce y salado' busca poner en valor la singularidad de este entorno natural, donde confluyen aguas saladas y dulces, y dar a conocer la rica historia cultural de Sigüenza y de toda su comarca.

Este rincón considerado único en la provincia de Guadalajara se sitúa en el alto valle del río Henares. A lo largo de la historia, se han desarrollado importantes batallas en sus alrededores para disputarse el control de este pequeño municipio que involucraron a pueblos como los celtíberos, los romanos o los visigodos.

Así fue hasta que en el año 1123 se produjo la reconquista de esta localidad, dando comienzo a una época de gran esplendor. E incluso contó con su propia universidad a partir del año 1489. Su repercusión perduró hasta la época de la Guerra Civil, cuando se convirtió en una gran fortaleza republicana.

¿Qué podemos ver en Sigüenza?

Uno de los puntos de mayor interés en Sigüenza es la Catedral de Santa María, un templo románico-cisterciense que se construyó en el año 1124. Esta construcción es muy famosa por su majestuosa fachada con dos torres campanario y rosetones góticos además de la Capilla de los Arce.

Otro de los lugares de visita obligada es la Plaza Mayor, que ofrece un ambiente renacentista. Además, comunica con el castillo, un antiguo edificio construido sobre una alcazaba musulmana convertida en parte de la Red de Paradores Nacionales de Turismo.

Antes de marcharnos de Sigüenza, no podemos olvidar visitar el Museo Diocesano, el Convento de las Clarisas o el Barrio de San Roque. Y para los amantes del medioambiente, el Parque Natural del Barranco del Río Dulce. Por ello, Sigüenza, que espera convertirse en Patrimonio de la Humanidad muy pronto, es el lugar perfecto para perderse y pasar unos días de descanso, deleite y desconexión.