Adoración al pato de goma: la iglesia más loca de Lavapiés es de entrada gratuita

Los templos e iglesias suelen ser lugares sagrados y muy respetados por la gente. Además de funcionar como lugar de profesión de diferentes religiones, también forman parte del patrimonio artístico y cultural de las ciudades y pueblos en los que se encuentra. Muchas de ellas guardan joyas como frescos o esculturas de gran valor artístico, tanto por su interior como por sus fachadas y construcción en general. 

En Madrid, como no podía ser de otra manera, las iglesias abundan y se pueden encontrar en diferentes tamaños y estilos arquitectónicos. Algunas son más como una capilla o ermita, otras son de gran tamaño y pasan a ser llamadas catedrales… Lo cierto es que puedes visitar cientos de ellas, ya sea con fines religiosos, culturales o por ocio. 

Este último caso es el que se aplicaría para acudir al lugar que te descubrimos hoy, ya que es probable que mucha gente lo desconozca. Se trata de la Iglesia Patólica, y no, no está mal escrito. Esta pequeña capilla, pertenece al Paticano, y en ella se adora a la figura del pato de goma, pato de plástico, patito amarillo… Puede ser llamado de diferentes formas. 

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Sea como fuere, lo cierto es que desde diciembre de 2012 en Madrid existe un lugar en el que se vive una ‘religión’ nueva, que no tiene nada que ver con Jesucristo, los Santos ni la Virgen María. Puede que esto resulte algo ofensivo para los creyentes, pero este lugar lo único que busca es una manera diferente de hacer humor y que quienes acudan pasen un buen rato. 

Este curioso lugar se ubica en el barrio de Lavapiés, concretamente en la travesía Primavera, número 3, y abre los viernes y sábados de 18:00 a 20:00 y los domingos de 13:00 a 14:00 horas. Estos horarios tan reducidos se deben a que en realidad se trata de un show en el que la figura del pato se ensalza como todopoderoso, y se realizan discursos y charlas llenos de simbolismo sarcástico y humorístico. 

Además, los domingos, se realizan ‘misas’, ‘bautizos’,  ‘bodas’ y ‘divorcios’ llevados a cabo por el artífice de todo este show, el humorista y bufón Leo Bassi, quien asegura la crítica y la sátira desde la carcajada. Además, en esas mismas jornadas, se reproducen cortos exclusivos con casi 120 años de historia, que comparte Leo Bassi gracias a ser el bisnieto de Giorgio Bassi. En ellos se muestran las actuaciones de los primeros payasos y su gran atractivo es que fueron filmados por los hermanos Lumière. 

Si quieres acudir a la Iglesia Patólica y pasar un rato de muchas risas y locura, se aconseja ir con tiempo o reservar una visita, ya que el local es pequeño. Lo mejor de todo es que la entrada es gratuita y es un plan perfecto para esos días en los que quieres alegrar el fin de semana.