El Consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, daba una cifra el miércoles pasado: 1.500. Correspondía al número exacto de camas en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) de las que disponía la sanidad madrileña. Aquellas áreas del hospital donde se trata a los pacientes más críticos del coronavirus: los que no pueden respirar y, por tanto, necesitan de un respirador asistido y ser intubados.
En el momento en el que el político habló, Madrid ya tenía 1.404 de esos críticos —30,6% del total en España—. Seis días después, tal y como alertaron los profesionales sanitarios, la situación es agónica. El colapso en las UCI y la falta de respiradores, una realidad. Y ya se cuentan por decenas los pacientes que están muriendo en las plantas de los hospitales madrileños.
Frente a esta situación de gravedad en la mayoría de hospitales de la capital, la solución más inmediata ha sido endurecer los criterios de cara a elegir qué enfermos pueden ir o no a la Unidad de Cuidados Intensivos. En otras palabras, elegir quién tiene más posibilidades de superar la Covid-19 e intentar salvarle la vida. Todo ello, teniendo en cuenta que a pesar de la gravedad que presente el paciente, no se podrán enviar más enfermos a las UCI hasta que se queden plazas libres. Bien por muerte, o bien por alta hospitalaria en dicha unidad.
¿Cuáles son los criterios? Principalmente la edad y el historial clínico, según explican fuentes hospitalarias a EL ESPAÑOL. De este modo, si tienes 45 años, vas a la UCI, pero si tienes más de 70, lo más seguro es que no. Todo responde a una regla meramente médica, según detallan las mismas fuentes, pues un paciente infectado de coronavirus muy anciano y grave es difícil [aunque no imposible, ya que se han dado casos] que resista a dos semanas de ventilación mecánica; mientras que una persona joven o de edad madura sí lo soporta.
De este modo, si queda una plaza libre en la UCI y un médico tiene que elegir entre dos pacientes graves. El más joven es enviado a dicha unidad y el otro a la planta hospitalaria, sin opción a la intubación puesto que tampoco quedan respiradores, "y recibiendo tratamiento con una mascarilla de oxígeno que, en la mayoría de ocasiones, no remite el estado de gravedad y acaba en fallecimiento", cuenta un enfermero del Hospital Universitario La Paz a este diario.
Criterio no escrito
Una medida que, irremediablemente, ha desencadenado la muerte de personas de 70 años en adelante en las plantas de los centros sanitarios, ante la imposibilidad de reubicarlos en la Unidad de Cuidados Intensivos. Porque no había espacio ni medios. Por ejemplo, según ha podido saber este periódico, en una planta del Hospital Universitario Gregorio Marañón, fallecieron seis pacientes de 73 a 83 años en la última semana. Y en el Hospital Universitario Infanta Leonor de Vallecas, según publicó El Confidencial, fallecen de 15 a 20 pacientes en planta cada día a causa del colapso en las UCI.
Hace dos semanas, según relatan sanitarios de distintos hospitales madrileños, estos criterios no existían, pero dada esta situación no queda opción. No obstante, lo que llama la atención de estas medidas es que no están escritas en ningún sitio. "Le pregunté a un doctor que si había puesto ese criterio por escrito, la edad y los demás factores que se tenían en cuenta, pero me dijo que no se atrevían hacerlo", señala un enfermero de La Paz.
Una enfermera del Hospital Universitario Gregorio Marañón apunta, en cambio, que "no tienen que estar por escrito dichas pautas" ya que todo depende del médico, "que valora en cada caso quién va y quién no a la UCI".
En el Hospital Universitario Ramón y Cajal, por ejemplo, esa edad límite para ser estimado a la UCI ha llegado incluso a bajar a los 65 años, según cuenta una enfermera a este periódico. "Solo lo he visto una vez, generalmente a nadie se le desahucia hasta que la situación es crítica y hay que elegir entre pacientes muy jóvenes o gente muy mayor que no va a tener gran esperanza de vida después", cuenta.
Esta última semana, no obstante, en este centro no se ha asignado UCI a aquellos pacientes que tuviesen de 80 años en adelante, todo depende de cómo este esa unidad. "Lo peor siempre viene cuando están colapsadas", relata. "Si están en planta y empiezan a empeorar, los médicos les valoran y tras desestimar la Unidad de Cuidados Intensivos, se ofrece a los familiares del enfermo la sedación. Pero luego hay otros que resisten, por ejemplo hoy hemos dado el alta a una señora de 95 años", añade.
Entre tanto, en estos hospitales también se han desestimado cuidados intensivos para pacientes que tenían entre 65 y 70 años, pero según subrayan los sanitarios, siempre ha sido porque tenían patologías previas, en este caso, respiratorias y cardiovasculares.
Traslado a CCAA
A esta situación de colapso hospitalario, también se suma la gran descoordinación entre los hospitales de cara al traslado de pacientes que necesitan de cuidados intensivos, según denuncian los enfermeros. Hasta hace una semana, en Madrid funcionaba el denominado corredor de la UCI, que permitía mover a pacientes intubados de un centro a otro. Pero este mecanismo dejó de utilizarse puesto que ya no quedan plazas UCI en ningún hospital de Madrid.
No obstante, la saturación de las Unidades de Cuidados Intensivos debido al coronavirus es ahora mismo "la mayor preocupación" de los gestores sanitarios y desde el Ministerio de Sanidad se "está valorando" el traslado de pacientes desde regiones con mayor presión en las UCI, como Madrid y Cataluña, a otras donde haya menos presión asistencial, según detalló María José Sierra, jefa de área del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias, en una rueda de prensa el pasado lunes. El ministro del ramo, Salvador Illa, también insistió en en esa línea, pero apuntó que de momento no se estaba llevando a cabo.