Una calle de Madrid desata la fiebre por el lujo: pisos de los bisnietos de Franco y el palacete de un marqués
En pleno barrio de Salamanca, esta calle ha protagonizado dos de las grandes operaciones del residencial de lujo de los últimos meses.
4 junio, 2023 01:25Si una persona recorre a pie la calle Velázquez tardará unos 21 minutos de punta a punta. Son cerca de 2.800 metros de recta. En ese pequeño paseo, se cruzará con dos de los proyectos residenciales de lujo más potentes de la ciudad. En uno de los edificios, dos bisnietos de Francisco Franco harán pisos de alto 'standing'. En otra construcción, la antigua casa palacio del marqués de Frómista, una socimi pretende crear el "edificio residencial más exclusivo" de la capital con acceso desde Velázquez.
No es ninguna sorpresa que una calle del barrio de Salamanca protagonice las grandes operaciones del residencial de lujo. Esta zona lleva más de un siglo siendo el núcleo residencial de la burguesía madrileña. Le debe el nombre al terrateniente José María de Salamanca y Mayol, Marqués de Salamanca, uno de los grandes propulsores del barrio en el siglo XIX.
En los últimos años, Salamanca se ha convertido en el epicentro residencial de millonarios latinos. Una llegada de patrimonios que se debe, en parte, a promotores como los Capriles, los mexicanos de Terralpa o la magnate mexicana María Asunción Aramburuzabala.
El tramo de la calle donde se sitúan los dos edificios forman parte del barrio de Recoletos, el más caro de toda España para comprar una vivienda. Sólo en el último año, según un análisis de Fotocasa, el metro cuadrado se ha encarecido en esta zona un 14,4% hasta alcanzar los 10.270 euros.
Fuentes del sector inmobiliario consultadas confirman que los precios de venta de las viviendas que surjan de las dos nuevas promociones estarán "en la horquilla más alta".
Velázquez 53 y los bisnietos de Franco
El verano del año pasado, dos hermanos, bisnietos de Franco, cerraron la compra de Velázquez 53. Según El Confidencial, pagaron por el edificio entre 60 y 64 millones, una cantidad muy elevada.
Para llevar a cabo la operación, Francisco de Borja y Jaime Ardid Martínez-Bordiú, hijos de la nieta del dictador Mariola Martínez-Bordiú, constituyeron la sociedad ARD V53, participada en su totalidad por el holding familiar que Francisco y Jaime tienen también con su otro hermano, Javier. La compañía también se ha aventurado al sector hotelero y el de alojamientos turísticos.
En la misma calle Velázquez, pero en el número 62, los Ardid Martínez-Bordiú ya habían comprado y vendido el Gran Hotel Velázquez. El del número 53 fue construido en 1940 y cuenta con una superficie construida de 6.377 m2. El espacio se reparte entre seis plantas y varias viviendas que superan los 350 m2. Dispone, además, de un aparcamiento de 240 m2.
El edificio no está desocupado. De hecho, sólo una vivienda de Velázquez 53 estaba vacía cuando lo compraron los Ardiz Martínez-Bordiú. Según el citado digital, los contratos de arrendamiento de estos inquilinos caducan este 2023 y 2024. La idea de los bisnietos del dictador es que el edificio esté vacío el año que viene para hacer los pisos de lujo.
Velázquez 21, la casa palacio de un marqués
El número 21 de la calle Velázquez es el otro gran producto que ha acaparado titulares en los últimos meses. El edificio se levantó en una esquina del cruce con la calle Jorge Juan y tiene más de un siglo de historia. Según la guía del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM), fue Francisco Sánchez-Pleités, marqués de Frómista, quien encargó al arquitecto Espelius la construcción de la casa palacio.
El Ayuntamiento de Madrid premió a la casa como la mejor construida en 1907. Sánchez-Pleités quería el piso principal del edificio como residencia propia. El resto de pisos (bajo, primero, segundo, tercero y áticos) los destinaría al alquiler, con dos viviendas en cada planta. De la construcción llama la atención, sobre todo, el chaflán con una torre cilíndrica que está coronada por una cúpula peraltada de estilo neobarroco francés.
La familia Grifols, principal accionista del grupo farmacéutico del mismo nombre, se hizo en 2019 con esta codiciada pieza. Pero no se la quedó mucho tiempo entre manos. Hace unas semanas, Inbest GPF -la socimi nacida de la unión entre Inbest y GPF Capital- compró el activo. El edificio, según la plataforma de big data inmobiliario Brainsre, está valorado en 60 millones.
La promoción podría contar con hasta ocho viviendas de lujo -dos por planta- de 500 m2 cada uno. El proyecto ha llamado el interés de operadores hoteleros de lujo para crear un concepto de 'branded residences', detalla Brainsre. Velázquez 21 también tendrá más de 2.000 m2 dedicados a uso comercial o para restauración.