La Policía Nacional busca al hombre que disparó cuatro veces el viernes por la noche en una calle de la Elipa contra Francisco Maya, un conocido ladrón y 'alunicero', que ya se encuentra fuera de peligro en el hospital, han informado hoy a Europa Press fuentes policiales.
Los hechos tuvieron lugar sobre las 23.30 horas del día 14 a la altura del número 11 de la avenida de Marqués de Corbera. Varios vecinos avisaron a la Policía de que tras una discusión oyeron dos detonaciones.
Pero según algunos testigos, la víctima se encontraba charlando con unos amigos cuando llegó al lugar un joven encapuchado y vestido con ropa oscura subida en un patinete. Se apeó y descerrajó cuatro tiros, ya que fueron cuatro los casquillos encontrados por la Policía.
Pero la víctima pudo zafarse y solo sufrió una herida de bala en el brazo izquierdo con orificio de entrada y salida. Hasta el lugar acudieron los sanitarios del Samur-Protección Civil, que le trasladaron con pronóstico reservado al Hospital Gregorio Marañón.
Su estado ya no reviste gravedad y se recuperaba hoy satisfactoriamente de las heridas. Hasta el lugar acudieron agentes de la Policía Judicial y Científica, que recogieron los casquillos y hablaron con los testigos. Cerca de allí encontraron poco después la pistola con silenciador utilizada y el patinete eléctrico del supuesto atacante.
Múltiples antecedentes penales
Al parecer, este y la víctima se conocían. El herido es F.M.S., español de 24 años y etnia gitana, más conocido como el 'Gordo Maya', un 'alunicero' con múltiples antecedentes policiales y miembro de la banda del Goyito.
Sus últimas fechorías las cometió supuestamente en plena pandemia. En noviembre de 2020 fue detenido acusado, en esta ocasión de apuñalar a un conductor tras una discusión de tráfico, han informado a Europa Press fuentes policiales.
Semanas antes, había sido arrestado junto a Goyito, su hermano Christian 'El Ruso', 'El Mansalvas' y un joven marroquí por cometer más de medio centenar de robos en talleres, estaciones de servicio y comercios de las provincias de Madrid y Toledo. Pero quedaron de nuevo en libertad con cargos tras pasar a disposición judicial, pese a que entre todos superan el centenar de reseñas policiales.