Para muchos españoles, la televisión en la infancia era el Grand Prix del verano. El programa de Ramontxu, el de los 'Troncos locos' y la 'Patata caliente'. El que enfrentaba a dos pueblos de distintas puntas de España. Uno vestido de amarillo contra otro de azul. Por eso, la ilusión en Colmenarejo estaba por las nubes este lunes por la noche. Es el único municipio madrileño que participa en el regreso del concurso 18 años después de su última emisión. La localidad lleva de fiestas patronales desde el pasado viernes. La cartelera incluye más o menos lo típico: el tributo a Mecano, conciertos de artistas locales, la caldereta, el trofeo de Mus... Pero da igual. El plato fuerte era ver a los suyos pegarse leñazos para ganar al pueblo rival. Ver a Don Ángel, el cura del municipio, y a los otros 29 'guerreros' de Colmenarejo dejándose la piel. 

"Es un sueño de infancia total", reconoce a este diario una de las concursantes. En un pueblo de algo menos de 9.500 vecinos, participar en el estreno del mítico programa se había convertido en un evento extraordinario este último mes. Don Ángel Amigo, el sacerdote de los colmenarejanos, pensó que le estaban tomando el pelo cuando le llamaron para concursar. "Vengo a aportar la fe en mi equipo", dice en el vídeo promocional del concurso, donde también exhibe su tatuaje de Jesucristo en el gemelo.

El equipo del municipio -formado por 15 chicos y 15 chicas- también lo han integrado vecinos como Iván, conocido como "Escarcha", entrenador de fútbol 11 por excelencia en el pueblo. O como Gonzalo Escalera, referente del fútbol sala en Colmenarejo. Malagón, que vive en el pueblo desde hace 24 años, es otro "portento físico" por el que apostó el municipio para el concurso. A él le tocó sortear los resbaladizos troncos locos. Igual que a Sara, de sólo 24 años y que acaba de ser madre hace cinco meses. 

La realidad es que el programa se grabó hace unas semanas. El resultado, sin embargo, ha permanecido bajo secreto hasta la retransmisión del lunes. El Grand Prix arrancó pasadas las 22.30 horas. La Plaza de la Constitución de Colmenarejos se llenó de vecinos que siguieron el concurso a través de una pantalla gigante instalada por el Ayuntamiento. Nadie quería perderse al municipio entrar en la historia del Grand Prix.

El enfrentamiento entre los dos pueblos es el primero que se emite en este formato de RTVE renovado. El objetivo en todo momento ha sido el de recuperar la esencia del programa que cautivó a cientos de miles de espectadores entre 1995 y 2005, en 11 temporadas ininterrumpidas. Por eso, el maestro de ceremonias no podía ser otro que Ramón García. En este remake está acompañado por la famosa streamer española Cristinini y la actriz Michelle Calvó. También se ha respetado la figura de los 'padrinos', dos famosos que representan a cada municipio durante el programa. En esta ocasión, el 'embajador' de Colmenarejo fue el actor Miguel Ángel Muñoz, mientras que la artista Lolita Flores defendió al equipo granadino.

"Paliza del copón"

Los dos municipios se enfrentaron a una decena de pruebas. Algunas de ellas, muy conocidas por el imaginario colectivo de la televisión española: los 'Troncos locos', el 'Baloncesto en pañales' o la 'Patata caliente'. Pero la productora ha incluido retos renovados, como 'Jurassic Prix', 'Los ki-monos', 'Perrito piloto' o 'Escala como puedas'. Quién consigue más puntos en cada prueba, gana el concurso.

Los vecinos de Colmenarejo que siguieron el programa frente al Ayuntamiento comenzaron eufóricos. Algunos concursantes acudieron a la cita en la plaza con camiseta amarilla, el color que se asignó al municipio en el programa. Hubo gritos, aplausos y vítores cuando los madrileños conseguían victorias en las diferentes pruebas. La tensión decayó cuando Alfacar se distanció. Sus 'atletas' de azul parecían, por momentos, muy superiores. Pero Colmenarejo no perdió la esperanza. "¡Sí se puede! ¡Sí se puede!", gritaron desde la plaza.

Colmenarejo ganó en la prueba de la 'Patata caliente' o en la de los 'Pingüinos matemáticos' y empató la de los 'Troncos locos'. Ya en el tramo final del concurso, llegó a pelearle el liderazgo a Alfacar. La ilusión final se quedó en un espejismo. El último juego, 'El diccionario', condenó a 'Colme' a la derrota. El resultado final fue de 27 a 19 puntos a favor de los andaluces. "Parece que vamos a remontar, pero al final nos meten una paliza del copón" (...) "El resultado no muestra el esfuerzo que hemos hecho", asegura la misma concursante. Esta puntuación se quedará grabada en una clasificación que forman los ocho municipios invitados a esta reedición del Grand Prix. 

Las dos polémicas

El programa no estuvo exento de polémica. Al menos, así lo sintieron varios colmenarejanos cuando llegó la prueba del 'Perrito piloto'. "Tongo, tongo", se coreó entre el público. En este juego, el concursante debe llevar una bandera hasta la meta con el fuerte viento en contra generado por un ventilador enorme. Según algunos vecinos que estuvieron presentes el día de la grabación, el ventilador de Alfacar apuntaba en una dirección que perjudicaba menos a los sprints de los alfacareños.

En la prueba 'Jurassic Prix' ocurrió otro contratiempo. El reto consiste en una especie de yincana con vestuarios prehistóricos y nuevamente con obstáculos. Fue el juego en el que participó Don Ángel. Y no le fue nada bien. El párroco debía alcanzar a su rival y tocarle para eliminarle. Pero se cayó al suelo desde un monopatín y acabó lesionado. Juanfran, el granadino al que perseguía, capitán del equipo de Alfacar, es un adepto al CrossFit en el municipio granadino. "Eran buenos chavales. También es verdad que eran todos de un gimnasio de CrossFit. Y nosotros, pues gente normal del pueblo", comenta otro participante. 

En el vídeo promocional de Alfacar se ve a Juanfran entrenando a varias personas, en lo que se puede presuponer que también son concursantes del Grand Prix. En cualquier caso, también aparecen una panadera y el florista del pueblo como integrantes del equipo. "En las pruebas más físicas, la de la yimcana, el suyo [Juanfran] la hizo en un minuto. Y el nuestro se reventó una costilla", añade el concursante de Colmenarejo, que apunta a que la mayoría, aunque no todos, entrenaban CrossFit. En el equipo de la localidad madrileña también había jóvenes deportistas: unos seis que hacen ejercicio de forma recurrente y "gente mayor" que también entrena a menudo. "Pero no era ni parecido" a la preparación de Alfacar, asegura esta misma persona. 

Pese a la derrota, decenas de colmenarejanos aguantaron en pie las dos horas que se prolongó el programa. En ese rato, comentaron, rieron, gritaron, decayeron, remontaron y, finalmente, se lamentaron por la derrota. Aunque la experiencia ha merecido la pena. Muchos de los vecinos que copaban la plaza volvieron a pasárselo como niños con el programa de su infancia: "Lo hemos disfrutado muchísimo".