La Policía Nacional y la Guardia Civil ha desmantelado una plantación de marihuana, ubicada en un chalet de lujo de un clan familiar, en la localidad madrileña de Villalbilla, donde también intervinieron varias armas de aire comprimido y de fuego real. El operativo se ha saldado con cuatro detenidos, entre ellos familia, a los que se les imputan los delitos de pertenencia a grupo criminal, contra la salud pública, tenencia ilícita de armas y defraudación de fluido eléctrico, según informa este viernes la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
Tras los registros efectuados, se han intervenido casi 1.400 plantas de marihuana y diferentes armas de airsoft (aire comprimido), un revólver modificado para hacer fuego real y dinero en efectivo, han desgranado ambos cuerpos en un comunicado conjunto.
La investigación se inició el pasado mes de abril gracias a la colaboración ciudadana. Tras las pesquisas llevadas a cabo, los investigadores pudieron comprobar que a la citada vivienda accedían siempre las mismas personas, con un reparto claro de funciones, ya que cada uno tenía encomendada una tarea concreta.
Se comprobó cómo en el interior de la misma, permanecía constantemente un varón con funciones de vigilancia, encargado de solventar cualquier incidencia que pudiera darse, así como de la protección de la plantación. Además, se pudo constatar que la instalación eléctrica de la vivienda presentaba irregularidades y obtenían fluido eléctrico ilegalmente.
Armas por toda la casa
Después del registro efectuado, se han intervenido cerca de 1.400 plantas de marihuana, los útiles necesarios para el cultivo de la plantación y dinero en efectivo. Además, en este domicilio se localizaron e intervinieron varias armas, tales como varias pistolas y un revólver, presuntamente modificado para realizar fuego real, tres fusiles del calibre 22, dos escopetas y dos machetes.
Cabe reseñar que las armas fueron localizadas en puntos estratégicos de la vivienda, coincidiendo con ventanas y puntos de acceso a la misma, probablemente con el fin de poder repeler alguna agresión o intromisión en la misma.
Finalmente, la operación se ha saldado con la detención de cuatro varones, todos ellos miembros de un mismo clan familiar. A los arrestados se les imputan los delitos de pertenencia a grupo criminal, contra la salud pública, tenencia ilícita de armas y defraudación de fluido eléctrico, por los que fueron puestos a disposición judicial.