Los barrios de la ciudad de Madrid siempre guardan historias muy particulares entre sus calles y sus rincones. Sin embargo, hay una de esas zonas que destaca por un aspecto que es muy peculiar: se trata de luchar por conservar los pocos rayos de sol que le llegan ante la batalla que lidia cada mañana con cuatro colosos. Es la Colonia de San Cristóbal.
Este conocido barrio de la ciudad de Madrid se sitúa junto a cuatro de las construcciones más importantes, colosales y espectaculares de la capital de España. Son las famosas Cuatro Torres. Lo que para buena parte de la ciudad es una bendición, para este pequeño barrio se trata de una lucha por el sol y por la luz natural. Una particularidad que casi ninguna zona de la ciudad vive y que añade un rasgo muy característico a la Colonia de San Cristóbal.
La página turística Madrid Secreto recupera en su cuenta de Instagram la particularidad que vive este barrio que se acuesta cada día con la sombra que siempre proyectan las Cuatro Torres. Y es que, con el paso de los años, la Colonia de San Cristóbal ha pasado a ser conocido como el barrio donde 'casi siempre es de noche'.
Las 'noches' de la Colonia de San Cristóbal
La cuenta de Instagram de la web especialista en turismo de la ciudad de Madrid ha conseguido viralizar uno de sus vídeos sobre uno de los barrios más peculiares de la capital. Se trata del que muestra las noches eternas de la Colonia de San Cristóbal, una zona que ha pasado a ser conocida como el barrio en el que nunca hay sol.
Este barrio se sitúa entre el Paseo de la Castallana y el futuro desarrollo urbanístico Madrid Nuevo Norte. Su cometido principal era crear una zona de viviendas para las personas que iban a trabajar a la Empresa Municipal de Transportes, más conocida como la EMT. Con este objetivo fue diseñado en el año 1954 por el arquitecto bilbaíno Secundino Zuazo.
Su figura es muy conocida en la capital, ya que es responsable de la creación de otros barrios y zonas como la Casa de las Flores o Nuevos Ministerios. Muchos de los madrileños, o personas que trabajan y viven en la capital, transitan cada día por calles que cuentan con el sello de este arquitecto vasco. Sin embargo, una de sus mayores obras, la cual ha cambiado mucho con el paso de los años, es la Colonia de San Cristóbal.
Este barrio se caracteriza por su aspecto sombrío y poco iluminado incluso aunque en el cielo de Madrid brille con fuerza un sol abrasador. Esto es así por la peculiar y curiosa distribución geográfica de la propia colonia, la cual está situada muy cerca de las famosas Cuatro Torres. La altura y el volumen de estos edificios colosales se interponen entre la línea imaginaria que el sol dibuja hasta el barrio.
Por ello, la Colonia de San Cristóbal se encuentra en permanente eclipse. De ahí que sea conocido como el barrio en el que 'casi siempre es de noche'. Para los habitantes de esta zona vivir en penumbra es casi lo habitual, ya que algunas de sus calles quedan ocultas bajo las majestuosas torres que comandan el cielo de la capital.
El complejo empresarial que constituyen estas torres priva de luz natural a este barrio casi durante todo el día. Una cuestión a la que año tras año han tenido que acostumbrarse. No obstante, se trata de una de las partes de la ciudad de Madrid cuyo desarrollo urbanístico más estancado se encuentra. Uno de esos barrios que necesitan, además de los rayos de sol, un gran impulso para revitalizarse y recuperar algo de la fuerza e ilusión perdidas.
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Mientras libra esa batalla, la Colonia de San Cristóbal sigue siendo famosa y reconocida, además de por su tradición como uno de los barrios clásicos de la segunda mitad del siglo XX, por esa particular sombra en la que desarrolla buena parte de sus mañanas y de sus tardes.