Este martes se conocía la noticia. Iván y José, los dos influencers conocidos como los Petazetaz, eran detenidos por agredir sexualmente a menores de edad a las que atraían al piso de uno de los arrestados ubicado en Villa de Vallecas.
Ambos formaban una especie de pareja de influencers en Instagram y, especialmente, en TikTok, donde llegaron a acumular más de 442.000 seguidores. En sus vídeos contaban anécdotas, por llamarlas de alguna forma, que les ocurría en su día a día, como cazar a una oca con acento chino o comer el carbón que les habían traído los Reyes Magos.
En algunos vídeos de TikTok, que luego también colgaban en Instagram, se les veía haciendo encuestas a otras influencers, con más de 47.000 seguidores en Instagram, sobre qué tipo de bebida les gustaba o su canción favorita en una especie de "ping pong" que les servía para incrementar su popularidad entre las chicas más jóvenes, principalmente.
[Detenidos dos influencers por violar a menores que captaban en TikTok: grababan las agresiones]
Ahora se ha descubierto que tanto Iván como José, que se hacía llamar "hernycool" por su segundo nombre, Hernán, en las redes sociales, utilizaban estos contactos para elegir a sus víctimas, drogarlas hasta anular su voluntad y violarlas. Y además, grabaron al menos una de las agresiones.
Una de las víctimas ha hablado con Telemadrid y explica que le "echaron droga en la bebida" sin su conocimiento. Al parecer, con esta droga "pueden hacer lo que quieran contigo" e incluso "si te pasas de dosis, te puede ocasionar la muerte".
Esta víctima, que fue la que denunció el caso a la Policía Nacional, asegura que "violaron a una chica en el Orgullo de 2023" y afirma que las agresiones de Iván y José que se conocen "son solo la punta del iceberg".
En algunos de sus vídeos compartidos también aparece publicidad de una marca de deportes y la asistencia a muchos eventos y fiestas que podrían ser también una fuente de ingresos para los dos detenidos que no ejercían ningún otro trabajo al margen de las redes.
Así actuaban
En la operación de la Policía Nacional, se descubrió que los influencers llevaban a las jóvenes a un piso donde realizaban juegos con sustancias estupefacientes hasta que conseguían anular su voluntad.
Utilizaban sus dispositivos móviles y cámaras de seguridad instaladas en el domicilio para grabar las agresiones sexuales. La investigación comenzó el pasado mes de diciembre, tras recibir una denuncia en la que se informaba de que en un domicilio del barrio de Villa de Vallecas podrían estar abusando sexualmente de menores.
La denuncia apuntaba a que los supuestos autores podían ser dos varones que contaban con un número muy importante de seguidores en varios canales de diferentes plataformas digitales. Tras las pesquisas llevadas a cabo, se logró la identificación de cuatro posibles víctimas, todas ellas menores de edad.
Las víctimas manifestaron que accedían al domicilio de uno de los investigados atraídas por su fama en redes sociales. Una vez dentro, éste, junto con su socio, comenzaban a consumir diferentes sustancias estupefacientes y se las ofrecían a ellas para que también las consumieran.