Siete agentes de policía resultaron heridos el pasado domingo hacia las 20:15 mientras realizaban una labor de vigilancia en la plaza de Nelson Mandela, ubicada en el barrio de Lavapiés, tal y como indican fuentes policiales.
Al parecer, los agentes vieron a un hombre y a una mujer intercambiando lo que parecían ser sustancias estupefacientes. El hombre, de origen camerunés y de 28 años, se dio cuenta de la presencia de los agentes, por lo que trató de escapar, pero finalmente la Policía pudo interceptarle.
Cuando la Policía le pidió que se identificara, el presunto camello comenzó a alentar a conocidos para que le ayudaran a defenderse y, en total, los agentes fueron rodeados por unas treinta personas que comenzaron a insultarles y a amenazarles con una muy actitud violenta.
Ante esta situación, se requirió otro indicativo policial que desalojó al citado grupo. A continuación, se procedió a identificar al hombre camerunés, cuyo comportamiento se volvió aún más agresivo que antes. Por eso, los agentes se vieron obligados a reducirle. Una vez que estuvo dentro del vehículo policial, comenzó a dar patadas y golpes de tanta fuerza que rompió una de las puertas y una ventana del coche.
Una vez en comisaría, el arrestado siguió teniendo una actitud violenta y hostil hacia los agentes. La detención terminó con siete policías heridos, cinco de ellos fueron atendidos por el Samur, puesto que tenían heridas leves, pero dos necesitaron asistencia médica mayor y fueron trasladados al hospital. El arrestado ya tenía antecedentes por delito de atentado contra agente de la autoridad y contra la salud pública.