La estrategia era tan astuta como efectiva: un beso somnoliento que sumía en un letargo profundo. Mientras las víctimas caían en un sueño inducido por fármacos, las jóvenes ladronas robaban en sus hogares.

Así operaba una organización delictiva en España, recientemente desmantelada por la Policía Nacional de Madrid, después de que los delincuentes realizasen compras con tarjetas robadas por más de 50,000 euros.

Las autoridades descubrieron que dos mujeres de este grupo criminal creaban perfiles falsos en aplicaciones de citas. De esta manera, contactaban con hombres con los que quedaban en sus domicilios. El grupo, compuesto por cinco individuos, extendía su actividad delictiva por todo el territorio nacional, pero sobre todo actuaban en Madrid.

La investigación, bautizada como operación Calíope, arrancó a finales de mayo tras varias denuncias similares en la capital. Las víctimas, al encontrarse con dos desconocidas en su casa, perdían la consciencia tras ingerir bebidas adulteradas con potentes somníferos.

Las criminales aprovechaban entonces para saquear la vivienda, llevándose tarjetas de crédito, documentación, dispositivos electrónicos, relojes de lujo y dinero en efectivo, acumulando un botín de 75.000 euros.

Cuando los perjudicados recobraban el sentido, tras 24 o 48 horas, se encontraban sin teléfonos móviles ni llaves, completamente incomunicados y desorientados. En algunos casos, las secuelas del fármaco les obligaron a recibir atención médica urgente.

Mientras tanto, los varones del grupo procedían a utilizar las tarjetas bancarias robadas para adquirir teléfonos móviles de alta gama, joyas, ropa de marcas exclusivas y realizar cargos en restaurantes. Todo ello, fruto del engaño del "beso del sueño".

Detención con más de 600 somníferos

El desarrollo de la operación dio un giro crucial cuando los agentes, a través de una pista clave, supieron de la llegada de una nueva integrante de la banda al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. 

Al aterrizar el vuelo, la sospechosa fue inmediatamente identificada y detenida por los agentes. En un registro minucioso de su equipaje, descubrieron un bote cuidadosamente oculto que contenía más de 600 pastillas somníferas.

Este hallazgo fue vital, ya que no solo evidenciaba su implicación en las actividades delictivas, sino que también prevenía futuros delitos, ya que las pastillas estaban destinadas a ser utilizadas en nuevos robos.

Actuaban por toda España

El 23 de junio, las autoridades llevaron a cabo registros simultáneos en Madrid y Barcelona. En la capital catalana, recuperaron 10.000 euros en efectivo y numerosos objetos robados. Además, hallaron una tarjeta de crédito a nombre de un hombre, que fue localizado en su domicilio aún aturdido y necesitando asistencia inmediata.

Los investigadores confirmaron que la banda había perpetrado al menos ocho robos con violencia, atacando a tres víctimas en menos de 12 horas en diferentes puntos de Madrid. A los cinco detenidos se les imputa pertenencia a grupo criminal, delitos contra la salud pública y ocho delitos de robo con violencia.

Tras ser puestos a disposición judicial, cuatro de ellos fueron encarcelados. La investigación sigue abierta, ya que no se descarta la aparición de más afectados por el perjudicial "beso del sueño".