Verano es sinónimo de obras en muchas ciudades e instalaciones de nuestro país. En la Comunidad de Madrid van a ser varias las que afecten a los ciudadanos que permanezcan en la región estos dos meses de vacaciones.

Entre ellas está la rehabilitación durante los meses de julio, agosto y septiembre de 2024 de la M-50, que van a afectar de lleno a los habitantes de Móstoles, Leganés, Fuenlabrada y Alcorcón.

El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha iniciado las obras de rehabilitación del firme de esta circunvalación de Madrid en el tramo comprendido entre los kilómetros 55,500 (enlace con la M-409) y 85,300 (enlace con la A-6), así como de los enlaces asociados a dicho tramo, a su paso por las localidades de Alcorcón, Fuenlabrada, Móstoles y Leganés, en la Comunidad de Madrid.

Las obras se realizan en el tramo 30 km de la M-50 a su paso por las localidades de Alcorcón, Fuenlabrada, Móstoles y Leganés. Con un plazo de 24 meses, consisten en el fresado, reposición y refuerzo de la capa de firme existente para mejorar la seguridad vial, el confort de uso y su durabilidad.

Dicha capa necesita renovación, ante el aumento de tráfico experimentado por la M-50 desde su puesta en servicio. Estos trabajos tienen una inversión de 13,8 millones de euros, IVA incluido, según ha informado el Ministerio de Transportes en su web.

¿Cómo te afectan las obras?

Sobre todo, las obras afectan a los conductores nocturnos. El grueso de las obras se están realizando y trabajando en todas las calzadas del tramo comprendido entre los kilómetros 55,500 al 65,700 en horario nocturno, para evitar en la medida de lo posible las molestias a los usuarios. En la campaña de verano de 2025, se acometerá la renovación del tramo comprendido entre los km 65,700 y 85,300, finalizando así el proyecto.

Durante las obras, se están realizando desvíos alternativos para distribuir el tráfico en el entorno de los cortes previstos. No obstante, por la gran intensidad del tráfico que soporta la M-50, se recomienda utilizar las vías de circunvalación alternativas (M-45 y M-40) para acceder a aquellas carreteras a las que no se puede acceder desde la M-50 (A-5 y R-5), evitando en lo posible la circulación por el tramo afectado por las obras.

Principales dificultades

Este tramo en obras de la M-50 se inauguró en 2004, por lo que lleva en servicio 20 años. Desde entonces, se han realizado tareas puntuales de conservación, si bien la infraestructura necesita una rehabilitación profunda para seguir prestando el servicio en las mejores condiciones.

La principal dificultad que plantean los trabajos previstos es la alta intensidad de tráfico que soporta este tramo, con una intensidad diaria ponderada de alrededor de 70.000 vehículos, un 10 por ciento de los cuales son vehículos pesados, según ha dado a conocer el Ministerio.

Estas obras se suman a las que ya están en marcha desde el 1 de julio en el entorno de Getafe y Leganés, por 25 millones de euros; y desde la semana pasada en Torrejón y San Fernando de Henares, por 27,8 millones.