La Policía Municipal de Madrid ha detenido a dos jóvenes de los doce participantes en la agresión que tuvo lugar el pasado jueves a las 4.00 horas a la salida de una discoteca. Estos golpearon a otros dos para robarles sus móviles.
Dos agentes de la Comisaría Integral del Distrito Centro Sur de la Policía Municipal de Madrid que estaban de paisano y circulaban con su coche oficial camuflado por la calle Toledo observaron el incidente. En este, una docena de jóvenes atacaban a otros que estaban en el suelo, que se resistían al robo de sus terminales y el resto de sus objetos de valor, según ha confirmado una portavoz del Cuerpo Local y ha adelantado Europa Press.
Pese al número de agresores, los dos agentes decidieron intervenir mientras pedían refuerzos para así salvar la vida de las víctimas, dos jóvenes de 18 y 19 años residentes en la capital. Los atacantes desafiaron a los oficiales, que se defendieron con sus defensas reglamentarias. Minutos después, llegaron seis patrullas de la Policía Municipal de Centro Norte y Centro Sur, además de dos patrullas de la Policía Nacional.
Los dos jóvenes agredidos, que presentaban heridas graves en la cara y la cabeza, agradecieron la decisión de los agentes. Los heridos fueron atendidos por los sanitarios y trasladados al hospital. Según relataron a los agentes, estaban sentados en la calle tras salir de la discoteca cuando fueron atacados por esta turba de jóvenes que querían robarles.
Finalmente, los agentes detuvieron a dos de los agresores, acusados de robo, lesiones y atentado contra la autoridad. Se trata de A.M.C., español de 19 años, y A.C.M., español de origen magrebí de 20 años, ambos residentes en Fuenlabrada. Uno de ellos llevaba en su bolsillo el teléfono móvil robado a una de las víctimas. La Policía continúa investigando para identificar al resto de los implicados.
Desarticulada otra banda que robaba móviles
Este mismo lunes también se ha desarticulado otra banda asentada en Madrid dedicada a robar móviles de alta gama en tiendas de telefonía. Lo hacían por toda España, moviéndose en vehículos alquilados.
La operación, en la que han sido detenidas 12 personas, arrancó el pasado mes de febrero cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de un incremento de los robos con violencia o intimidación de terminales móviles de alta gama en estos establecimientos.
Los investigados, de origen rumano, constituían grupos de trabajo de cuatro a seis personas que se desplazaban por todo el territorio nacional en busca de tiendas de telefonía móvil o lugares donde pudieran robar cobre, actuando de forma totalmente organizada y coordinada.
Una vez localizado un objetivo, los investigados analizaban el lugar, estudiaban los tipos y marcas de dispositivos móviles disponibles, los sistemas de seguridad de la tienda, tales como cámaras de videovigilancia o la posible presencia de vigilantes de seguridad en la zona.
Posteriormente, tres o cuatro hombres accedían al interior de las tiendas, y mediante violencia o intimidación, arrancaban los teléfonos de los expositores en los que estaban anclados y huían rápidamente del lugar.