Una de las mayores preocupaciones de muchos propietarios de inmuebles es tener que enfrentarse a la okupación de la vivienda. Cuando tiene lugar esta situación, hay que tener claro que no se pueden cortar los suministros de agua, gas o luz, puesto que se trata de una serie de conductas que pueden "constituir un delito", tal y como recalca la Policía Nacional.
Para evitar que pueda llegar a darse esta situación y que una casa sea okupada, la Policía recomienda intercambiar medios de contacto con los vecinos, de forma que puedan ser localizados y debidamente avisados en el caso de que haya señales de que se está intentando cometer una okupación, además de que aconsejan no publicar en redes sociales que se está de vacaciones e instalar mecanismos de seguridad, como un bombín de la puerta recortada o sistemas de videovigilancia, entre otros.
Sin embargo, en ocasiones estas medidas de seguridad no impiden que se okupen viviendas en España, lo que implica tener que dar comienzo a un proceso legal que puede llegar a dilatarse durante varios meses hasta que se consiga expulsar a los okupas del inmueble.
En este sentido, es importante saber que, si se logra demostrar que los okupas han entrado en la vivienda en las últimas 48 horas, la Policía puede proceder al desalojo sin necesidad de orden judicial.
En caso contrario, se inicia una vía judicial donde será posible interponer una demanda civil por desahucio o penal por un delito de usurpación de bienes inmuebles.
¿Cuánto tarda el desalojo de una casa okupada en Madrid?
A la hora de hablar del tiempo que se tarda en desalojar a un okupa de forma definitiva, hay que saber que puede ser muy variable. En el caso de Madrid, según datos del Consejo General del Poder Judicial relativos al año 2023, los procedimientos verbales posesorios por ocupación ilegal de viviendas duraron, de media, 11,2 meses, un periodo de tiempo que duplica el necesario en 2018, cuando era de 5,2 meses.
Por su parte, el portal inmobiliario Idealista suma a los procedimientos verbales, las apelaciones de sentencias en las Audiencias Provinciales en procedimientos civiles. En este sentido, el Consejo General del Poder Judicial indica que en Madrid se demora unos 10,3 meses deshacerse de los okupas.
Así pues, teniendo en cuenta estos cálculos, en la capital de España el tiempo total que se tarda en desalojar de una casa a un okupa alcanza los 21,5 meses de media.
Consejos para prevenir que una casa sea okupada
Frente al aumento de las ocupaciones ilegales, los expertos recomiendan adoptar una serie de medidas de prevención que pueden resultar claves para evitar que un inmueble pueda ser okupado o, en su defecto, que se pueda recuperar en el menor espacio de tiempo posible. Para ello, es recomendable:
- Instalación de cámaras de seguridad y alarmas: la presencia de cámaras de seguridad y alarmas actúa como un gran elemento disuasorio contra la intrusión en las viviendas, proporcionando una mayor seguridad para el propietario del inmueble Estos sistemas alerta de forma inmediata de la presencia de un intruso en el hogar, permitiendo poder tomar medidas rápidas y ponerlo en conocimiento de la policía para que pueda comenzar con el proceso de desalojo.
- Puertas con sistemas 'antiokupación': en el mercado podemos encontrar puertas de acero, cuya demanda está aumentando de forma significativa y que se instalan de forma provisional para evitar que otras personas puedan entrar en viviendas desocupadas. Es importante asegurarse tanto de proteger la puerta principal de la vivienda como el resto de posibles accesos, como puertas, ventanas…
- Red de vecinos de confianza: los vecinos pueden ser de gran ayuda para vigilar una vivienda y que incluso puedan ser quienes alerten a la policía en el caso de detectar algún tipo de irregularidad. Por este motivo, conviene mantener una red de vecinos de confianza que esté al tanto de tu ausencia y puedan tener la forma de contactar contigo vía telefónica. La colaboración entre vecinos puede ser clave para evitar este tipo de situaciones.
- No facilitar la okupación: es conveniente no poner facilidades para que una vivienda pueda ser okupada, por lo que conviene evitar dejar copias de las llaves de la casa en lugares evidentes como buzones, felpudos o macetas, además de ser fundamental no divulgar información que puedan ser usadas por terceros para entrar en una casa. Por lo tanto, conviene no informar acerca de ausencias prolongadas en redes sociales y otras plataformas. También sería conveniente mantener la vivienda en buen estado y con apariencia de estar evitada, manteniendo limpios el jardín y/o terraza, recoger el correo del buzón con regularidad, etcétera.
- Documentación de la vivienda: ante la posibilidad de no poder tener acceso a la documentación original de la vivienda, se recomienda tener copias digitalizadas de escrituras, contratos de arrendamiento y empadronamiento en dispositivos móviles, ordenadores o en la nube. Esto agilizará todo el procedimiento en el caso de que sea necesario denunciar la presencia de okupas en un inmueble.
- Vídeos del estado del inmueble: grabar vídeos de la vivienda antes de una ausencia prolongada, como las vacaciones, puede ser muy importante en el caso de que haya que presentar una denuncia, pues son vídeos que sirven como una evidencia visual del estado original en el que se encontraba la propiedad.
Siguiendo estas recomendaciones será menos probable que una vivienda sea okupada, y si lo es, que se puedan dar los pasos para recuperarla con la mayor rapidez posible.