Arranca una de las semanas del año más 'movidas' en Madrid. En los días previos a la Navidad, las carreteras de la capital se convierten en un constante ir y venir de conductores que se desplaza a cenas de empresa, comidas con amigos y reuniones con familiares. Ante este aluvión de traslados, la Policía Municipal de Madrid ha dado el pistoletazo de salida a su Campaña de Vigilancia y Control de Alcohol y Drogas del 2024.
Tal y como informan fuentes del cuerpo de Policía Municipal a Madrid Total, la campaña se desarrollará entre los días comprendidos entre el lunes 16 al domingo 22 de diciembre de 2024.
Durante estos siete días, las 22 comisarías integrales de distrito aumentarán los controles de alcoholemia y drogas, poniendo especial énfasis en las diversas zonas de ocio de Madrid.
Además de las comisarías de cada distrito, también participan en esta campaña los servicios especiales que vigilaran los recorridos por vías principales y también en la M30, una de las arterias principales de Madrid.
Por otro lado, fuentes policiales indican a este periódico que en el turno de la mañana y de la tarde se intensificará la vigilancia a conductores profesionales (transportistas, taxistas, etc.) durante su jornada laboral. Se trata de una medida para garantizar la seguridad vial, ya que durante las horas en las que los conductores están trabajando la tasa de alcoholemia permitida es menor.
Pero no hay que olvidar que esta campaña especial afectará a todos los conductores que se desplacen por las calles y carreteras de Madrid, sobre todo en las franjas de la tarde y de la noche. En estas horas se acentuarán los controles de alcoholemia con especial hincapié las noches del viernes y del sábado.
Como no puede ser de otro modo, la ubicación de los controles es secreta y su objetivo no es otro que prevenir las graves consecuencias que supone conducir un vehículo bajo los efectos del alcohol y de las drogas.
2023, año récord en controles
El pasado 29 de noviembre se produjo un suceso que puso de relieve las graves consecuencias de mezclar el alcohol y las drogas con la conducción. A las 3.00 horas de aquel viernes, un conductor arrolló mortalmente a un joven de 25 años que esperaba el autobús en una marquesina de la plaza de Neptuno e hirió gravemente a otro.
Al parecer, el conductor perdió el control de su coche, pero las pruebas que le realizó la Policía Municipal de Madrid desvelaron que este hombre de 33 años cuadriplicaba la tasa de alcohol permitido y además dio positivo en drogas. El autor de este suceso está acusado de homicidio imprudente, lesiones, daños al patrimonio y conducción temeraria bajo los efectos de sustancias estupefacientes y alcohólicas.
Según los datos de la Memoria de Siniestralidad de la Policía Municipal del pasado año, en 2023 se realizaron 8.860 pruebas de alcoholemia relacionadas con siniestros viales, con un aumento de 5.939 pruebas más que en 2022 y superando las realizadas en los años anteriores.
Tal y como figura en el citado informe, en los 2.142 Atestados por siniestros de tráfico instruidos por vía penal en 2023 se registraron 1.271 pruebas de alcoholemia y drogas con resultado positivo. Este dato supone un 59,33 % de presencia de la conducción bajo la influencia de estas sustancias en los casos que se han instruido atestados por siniestros, y refleja la enorme incidencia de esta conducta en la siniestralidad.