En pleno julio, las condiciones naturales siguen sin acompañar al playeo en Málaga por segundo día consecutivo. Después de que este domingo la bandera roja ondeara en toda la ciudad por el taró, una espesa niebla que dificulta sensiblemente la visibilidad en estas zonas, este lunes la protagonista es la bandera amarilla.
Esta no supone la prohibición del baño, pero sí recomienda hacerlo con precaución porque se ha encontrado peligro. Según la aplicación municipal Playas de Málaga, a bandera de este color ondea en las playas de Campo de Golf / San Julián, Guadalmar / San Julián, Sacaba, La Misericordia, San Andrés, La Malagueta, La Caleta, Baños del Carmen, Pedregalejo / Las Acacias, El Palo, El Dedo, El Candado, El Peñón del Cuervo, Fábrica de Cemento y La Araña.
En este caso, no se trata solo del factor climatológico, sino que en las playas de La Misericordia, La Malagueta y La Caleta las medusas son las protagonistas de la llamada a la precaución.
Para evitar una molesta picadura, se recomienda por tanto que el baño -si se produce- se dé con medidas de seguridad, estando atento a alrededor constantemente y con especial cuidado con los niños.
Hace años, las medusas solo aparecían esporádicamente en los momentos finales del verano cuando las aguas alcanzaban temperaturas más cálidas, pero en los últimos tiempos su presencia temprana se ha hecho mucho más habitual en el litoral malagueño.
La presencia de estos invertebrados se suma al taró, que ya complicó el domingo de playa a muchas familias. Son ya varios los episodios en los que el taró ha hecho acto de presencia en la capital.
Este fenómeno suele responder a los cambios de temperaturas con fuertes variaciones de calor y frío, además de la humedad acumulada.
No obstante, ni la bandera roja ni la bandera amarilla suponen la prohibición de acceso a las playas -donde sí que se deben evitar las concentraciones-, por lo que se puede disfrutar de un día junto al mar, pero con más cuidado a la hora de entrar en él.