La Junta de Andalucía se ha marcado el reto de que en el año 2027, a seis años vista, el 25% de los desplazamientos en el área metropolitana de Málaga, que acoge a 16 localidades y a más de 1 millón de personas, se haga en transporte público.
Un gesto con evidentes beneficios medioambientales. Las estimaciones manejadas apuntan que supondrá una reducción cercana al 10% de las toneladas de dióxido de carbono emitidas por los medios de transporte motorizados.
Estos son algunos de los grandes objetivos con los que la Administración regional activa un nuevo plan de transporte para este espacio geográfico, clave en la región andaluza. Y ello debe suponer una pérdida drástica de protagonismo del vehículo privado.
La estrategia diseñada por la Consejería de Fomento avanza en su tramitación final. El documento, según han dado a conocer este martes, ha sido aprobado por la Comisión del Plan de Transporte Metropolitano del Área de Málaga, lo que va a permitir de manera casi inmediata la apertura del mismo a información pública para que sea objeto de sugerencias y modificaciones.
Con esta herramienta se pretende responder a las particularidades de una zona claramente afectada por "la fuerte estacionalidad de la demanda de viajeros debida al turismo".
"Este documento perfilará las actuaciones para reducir esa dependencia con el vehículo privado y promover el uso tanto del transporte público y de la bicicleta", han apuntado desde la Junta.
La versión preliminar, elaborada por la Dirección General de Movilidad, selecciona el escenario de mayor rentabilidad social y mejor impacto medioambiental, proponiendo actuaciones enfocadas a la mejora del transporte público y de mejora de la red viaria.
La propuesta incluye carriles reservados, servicios lanzaderas y prioridad semafórica para el transporte público
Entre las principales medidas, destaca la propuesta de carriles reservados, servicios lanzaderas, prioridad semafórica para el transporte público en los tramos urbanos y el fomento de la intermodalidad.
También se menciona la puesta en marcha de innovaciones tecnológicas para una mejor coordinación de modos de transportes, como el Centro de Control y Gestión del Transporte Público en Andalucía, que "ayudará a controlar el transporte público en Andalucía, para ofrecer mejoras permanentes y adaptarnos a las necesidades de los usuarios".
La estructura del plan sigue las indicaciones y recomendaciones del Manual de Elaboración de Planes Estratégicos de Políticas Públicas en la Junta de Andalucía, elaborado por el Instituto Andaluz de Administración Pública. Todas las actuaciones se han evaluado siguiendo la metodología propuesta por la Comisión Europea en su Guía para el análisis coste-beneficio en proyectos de inversión.
Dentro de este plan quedan integrados 16 municipios a su ámbito de actuación, con una población de 1.046.829 habitantes: Málaga, Alhaurín el Grande, Alhaurín de la Torre, Álora, Benalmádena, Cártama, Coín, Colmenar, Fuengirola, Pizarra, Rincón de la Victoria, Torremolinos, Mijas, Almogía, Casabermeja y Totalán.