Las imágenes impactan a cualquier mortal. No es para menos. Sierra Bermeja, el pulmón de la provincia de Málaga se llena de manchas oscuras cuando se observa desde las alturas, a vista de pájaro. Manchas que son rastro de las llamas de un incendio que ha estado activo casi una veintena de días. En concreto, dieciocho.
Aquel 8 de junio Pujerra sabía que algo no iba bien ante el gran despliegue de medios que Infoca trasladó a la zona tras varios avisos que llegaron a las tres de la tarde. El fuego que se inició en el interior de una finca que perteneció a Gadafi acabó afectando a Pujerra, Júzcar, Benahavís y Estepona. Una de las primeras jornadas de terral del año hacían muy complicadas las labores de extinción al equipo. De hecho, ni los medios aéreos pudieron actuar al completo las primeras horas, que resultan claves.
Los números también impactan. Más de 1.000 efectivos han trabajado en este incendio, que ha afectado a 3.500 hectáreas y que provocó que 2.000 vecinos tuvieran que salir de sus casas sin saber cuándo iban a poder volver, aún sin haberse recuperado de la pesadilla de septiembre de 2021, cuando vieron cómo Sierra Bermeja ardió durante la friolera de 46 días. En esa ocasión se vieron afectadas unas 9.000 hectáreas y Juan José Fernández, un bombero forestal de Infoca falleció trabajando para controlarlo.