Málaga volvió a vivir una nueva edición del Brisa Festival en la que la música, y un emplazamiento único, volvieron a ser los grandes protagonistas. Artistas de todas las generaciones se han dado la mano en un cartel excepcional con nombres legendarios de la cultura española: desde la década de los 80 a los grandes éxitos actuales.
Dry Martina y Amaia Romero fueron las encargadas de poner el broche de oro a este fin de semana en el que el nombre de Danza Invisible, en sus 40 años de carrera, ha brillado con luz propia.