La Policía Local de Torremolinos (Málaga) ha detenido a un hombre por tráfico de estupefacientes, ya que fue sorprendido tras supuestamente vender droga, en concreto cocaína, en una de las calles de la localidad.
Según han informado desde el Ayuntamiento en un comunicado, los hechos sucedieron mientras los agentes se encontraban prestando servicio de paisano en una zona donde eventualmente se produce consumo y venta de sustancias estupefacientes.
Así, los policías locales observaron cómo un hombre se encontraba en la terraza de un bar de la zona y transcurridos unos minutos tras recibir una llamada de teléfono y de forma apresurada se alejó un poco del lugar para encontrarse con una mujer joven. Supuestamente esta le entregó la cantidad de 25 euros, al tiempo que el individuo le dio a ella una bolsita pequeña de color blanco, estando en ese momento los agentes situados a escasos metros del lugar donde ocurrió la citada transacción.
Cuando la mujer se alejó de la zona, los agentes, tras identificarse, procedieron a entrevistarse con ella, momento en el que manifestó que previamente había contactado con el mencionado hombre para comprarle cierta cantidad de cocaína para consumo propio, habiéndole entregado 25 euros y recibiendo a cambio una bolsita pequeña de color blanco con una pequeña cantidad de cocaína.
Por tales motivos los agentes se incautaron de la sustancia estupefaciente que portaba la mujer, que fue advertida de la posibilidad de ser requerida en dependencias policiales por parte del grupo de investigación correspondiente.
Acto seguido, los agentes se dirigieron a la terraza del bar ya citado, lugar donde encontraron nuevamente al sujeto, y mientras esperaban a que saliera para detenerlo, por motivos de seguridad y al objeto de preservar su derecho al honor y a la intimidad, observaron cómo nuevamente el individuo recibía otra llamada de teléfono.
Así, se dirigió esta vez a una céntrica calle de la localidad donde nuevamente se encontraba la mujer anteriormente identificada, a la cual le hizo entrega de lo que parecía una cajetilla de tabaco, momento en el que los agentes intervinieron con celeridad y previa identificación como policías, requiriendo a la mujer la citada cajetilla de tabaco y comprobando que en su interior no había cigarros sino una bolsita pequeña de color blanco, conteniendo presuntamente cocaína.
Por estos motivos los agentes procedieron, previa identificación del sujeto, a detenerlo, siendo informado en el momento y de forma comprensible del motivo de su detención, así como de sus derechos como detenido según la legislación vigente.
Entre los efectos que llevaba el detenido en ese momento se encontraban dos pequeños trozos de sustancia presuntamente estupefaciente, supuestamente cocaína, con un peso total de 1,309 gramos, una caja de tabaco sin cigarros, 25 euros procedentes de la transacción de la citada sustancia y 90 euros procedentes de sus pertenencias, así como dos teléfonos móviles.