A una semana del comienzo de la Semana Santa, la chispa ha saltado entre los cofrades y la hostelería de Málaga. Pocas horas después de que concluyera la primera jornada de traslados, la Agrupación de Cofradías ha emitido un comunicado criticando abiertamente que los negocios no cumplen con la retirada de las terrazas durante las procesiones. Una denuncia "reiterada" que, sin embargo, los hosteleros califican de "precipitada".
En la nota difundida por la Agrupación de Cofradías, denuncian incumplimientos de algunos establecimientos durante el paso de las procesiones, lo que, a juicio de la institución, "proyecta falta de sensibilidad y responsabilidad por parte de algún negocio, generando un ambiente negativo que ensombrece al conjunto de la ciudad y al cofrade en particular".
La visión de la otra parte es completamente opuesta. La Asociación de Hosteleros de Málaga (Mahos) ha respondido inmediatamente mediante otro comunicado para defender que "el absoluto respeto que existe a la Semana Santa no se rompe por el hecho de que, de manera puntual, un negocio no haya sido avisado del paso de una procesión por su puerta o por el hecho de que comensales con distinta sensibilidad a la cofrade no se levanten al paso de una imagen".
En un cruce de reproches inédito, los hosteleros han llegado a poner sobre la mesa el hecho de que cada año, el sector "renuncia a una buena parte de la ocupación de vía pública que tiene autorizada y pagada en una fecha básica para la facturación de las empresas", incluso hay casos de negocios, alegan, "que tienen prohibida la instalación de terrazas en calles por las que no pasan tronos en toda la Semana Santa".
Previsión y colaboración
A siete días de que comience oficialmente la Semana Santa, la veda queda abierta entre los hosteleros y los cofrades que vienen sobrellevando en un delicado equilibrio el desarrollo de unas fiestas que está en el ADN de la ciudad y que, cada año, mueve a más de un millón de personas y genera un impacto económico superior a los 100 millones.
"Se trata de cooperación previa, construcción de imagen de ciudad, mucho diálogo entre partes implicadas y sobre todo mesura a la hora de realizar determinadas declaraciones que puedan suponer una acusación injusta a todo un sector", subraya Mahos en un comunicado en el que ha puesto el foco en la relevancia de contar "con la información adecuada y facilitada con la suficiente antelación".
"La colaboración tiene lugar siempre que hay aviso previo y todos los negocios acatan las órdenes administrativas y policiales cuando éstas son dadas", asegura.
Además de esa previsión, los hosteleros defienden que la forma de vivir de la Semana no solo responde a la visión de los cofrades. La fiesta, alega, "es patrimonio de toda la ciudad de manera objetiva pero existen numerosas concepciones subjetivas del evento, desde la religiosa y cofrade hasta la turística y cultural; desde la que tienen los malagueños hasta la que tienen los miles de visitantes que la enriquecen".
Ambas comunicaciones acaban poniendo énfasis en la relevancia de sendos sectores. Así, la Agrupación de Cofradías reconoce "el papel fundamental del sector hostelero en la ciudad de Málaga, que reconocemos a la gran mayoría de ellos como respetuosos y colaboradores con las tradiciones de la ciudad, lamentando que una minoría represente negativamente a todo un sector".
Para evitarlo, insta a los responsables de la hostelería a "que velen por el buen desarrollo de las procesiones, respetando las mismas a su paso por las diferentes calles de su recorrido y atendiendo en todo momento a sus peticiones en cuanto a ocupación de espacios".
Desde Mahos, igualmente, valoran y respetan la Semana Santa "como una expresión religiosa y cultural de primer orden, pero también como un acontecimiento económico y turístico básico para el empleo y la generación de riqueza".
Así, reiteran que "el compromiso de la hostelería malagueña con la seguridad y la celebración de las procesiones es tan fuerte como el que tiene con la imagen de Málaga como ciudad turística y cultural, que atrae a diferentes sensibilidades y que genera distintos reclamos del puramente cofrade o religioso para el uso y disfrute de toda su oferta".
Por ello, lamentan "la precipitación en los diagnósticos y en los juicios no es en absoluto adecuada para la imprescindible convivencia de todos los intereses de Málaga en la semana más importante del año".