Varios robos en viviendas y naves industriales de la comarca de Antequera hicieron saltar las alarmas entre los agentes de la Policía Nacional, que detectaron una estrecha relación entre ellos.
La investigación acabó destapando una célula criminal, compuesta por varios miembros que operaba de forma itinerante en la geografía andaluza y que finalmente ha sido desarticulada.
La Policía Nacional ha detenido a cinco de sus integrantes, tres hombres y dos mujeres, de entre los 42 y los 25 años, como presuntos responsables delitos de pertenencia a grupo criminal y delitos contra el patrimonio.
Los investigados tenían asignados distintos roles dentro de la organización: habría encargados de reconocer el lugar para elegir los objetivos, comisionados para conocer las medidas de seguridad y posibles vías de acceso y, finalmente, responsables de perpetrar los robos.
Según la investigación, la trama empleaba vehículos alquilados y extremaba las medidas de seguridad para no ser detectada y dificultar las pesquisas policiales.
Los detenidos están acusados de perpetrar cinco robos en viviendas y naves de la comarca antequerana, aunque la investigación apunta a que realizaban ilícitos de las mismas características en distintas partes de la geografía andaluza, centrándose en la zona limítrofe entre Málaga, Sevilla y Córdoba.
Además, todos ellos cuentan con antecedentes por delitos contra el patrimonio. Uno de ellos había sido detenido hasta en 40 ocasiones, según ha indicado la Policía Nacional en un comunicado.