Todo estaba a la espera de una confirmación oficial que ha llegado casi tres semanas después: las pruebas de ADN corroboran que el cuerpo encontrado el pasado 7 de junio en el apartamento que compartieron Marco y Sibora es el de la joven desaparecida en 2014.
Así lo han comunicado las autoridades judiciales este miércoles a la familia de la chica italiana. "Las pruebas de ADN, tras ser cotejadas con las muestras extraídas del cuerpo hallado, corresponde sin ningún género de dudas a Sibora Gagani", aseguran.
La Autoridad Judicial ya conoce la confirmación y en las próximas horas se pondrá en contacto con la familia para indicarles los pasos a seguir para que puedan repatriar el cuerpo de la joven a su país natal.
El hallazgo se produjo nueve años después de su desaparición. La Policía Nacional encontró el pasado 7 de junio un cadáver en el interior de una caja de madera emparedada tras una pared de la vivienda en la que Sibora vivió con su expareja y presunto asesino.
La investigación estuvo dormida hasta pocas semanas antes, hasta que Marco asesinó en la misma localidad malagueña a Paula y fue detenido. Este nuevo crimen abrió de forma inesperada la puerta para esclarecer el asesinato de Sibora en 2014.
Apenas un día después del asesinato,EL ESPAÑOL de Málaga desveló en primicia que una expareja de Marco había desaparecido en 2014 también en Torremolinos y desde entonces no había ni una pista sobre su paradero.
En ese momento, la Policía Nacional, centrada únicamente en la figura de la joven asesinada esos días en Torremolinos, amplía el foco de análisis y asume la necesidad de desentrañar lo ocurrido también con la joven italiana.
La historia da un giro radical cuando, según confirmó oficialmente la Policía, Marco confiesó de manera espontánea que él había matado a Sibora y que había escondido su cuerpo tras una pared en el piso en el que ambos vivieron en la misma localidad malagueña donde asesinó a Paula.
En ese momento, el foco se traslada al apartamento ubicado en la zona de El Calvario. Hasta en tres ocasiones los agentes acudieron para intentar confirmar la veracidad del testimonio, que Marco se negó a refrendar después ante la juez, y no fue hasta el cuarto intento cuando consiguieron llegar hasta el cuerpo.
Tras localizar una alteración en la construcción de una de las paredes del inmueble, los agentes se dispusieron a echarla abajo y fue ahí donde, rodeada de cal, localizaron una caja de madera en cuyo interior estaba el cuerpo de una mujer. Sobre él, un ramo de flores y una bolsa con un cuchillo manchado de sangre.
Solo quedaba la confirmación oficial que ahora se ha producido.