En plena negociación entre el PSOE y las formaciones nacionalistas e independentistas para armar una mayoría parlamentaria que permitiera a Pedro Sánchez seguir en la Moncloa, Andalucía se lanza a dar la batalla por la financiación autonómica. 

La Administración autonómica, liderada por el popular Juanma Moreno, lleva semanas agitando el fantasma de la infrafinanciación y acusando el "agravio" al que está sometida la comunidad respecto a otras. 

"Defenderemos a Andalucía y seremos exigentes con la financiación. No permitiremos más discriminación a los andaluces", ha apostillado este miércoles la consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Carolina España, que ha insistido en que el actual Sistema de Financiación Autonómica (SFA) "hace perder a Andalucía mil millones de euros al año desde 2009 y deja fuera a más de 200.000 andaluces".

Según la consejera, la reciente liquidación del sistema de financiación autonómica correspondiente a 2021 ha puesto de manifiesto que Andalucía dejó de recibir sólo en ese año 1.079 millones de euros. "Somos muy exigentes y vamos a ser beligerantes con este tema. No permitiremos maltratos ni más agravios a Andalucía", ha señalado.

España ha exigido "la creación de un fondo transitorio que compense el déficit de financiación que venimos padeciendo desde 2009, hasta que se reforme el sistema de financiación".

El actual sistema de financiación autonómica opera mediante unas entregas a cuenta de los recursos tributarios que se estima que ingresarán a lo largo del ejercicio en concepto de IRPF, y los porcentajes que marca la ley que les corresponde del IVA e Impuestos Especiales y que el Estado adelanta. En 2023, Andalucía fue la segunda comunidad que más dinero recibió de financiación autonómica, con casi 9.600 millones, solo por detrás de Cataluña.

ANDALUCÍA, LÍDER

Pese a todo, la consejera ha presumido de que la comunidad empieza "a liderar el crecimiento de muchos parámetros económicos, desde la caída del paro y la creación de empleo a las exportaciones, que han alcanzado cifras récord, pasando por el ritmo de creación de empresas". 

Igualmente, ha destacado el "esfuerzo de gestión realizado por contener la deuda y el déficit, lo que ha permitido reducir casi tres puntos la deuda de Andalucía en relación con el PIB". "Vamos en la buena dirección. La situación económica está mejorando, porque Andalucía ofrece estabilidad y confianza, certidumbre y seguridad jurídica a los inversores", ha apostillado. 

Para España, "si algo puede frenar el crecimiento económico de Andalucía es sólo la sequía". “El PIB está creciendo en torno al 2,2% y los analistas apuntan a que, a final de año, si no hubiera sequía podríamos estar en torno al 4% de crecimiento”, ha asegurado. Frente a ello, ha criticado que "el Gobierno central tiene el 67% de las competencias hídricas de Andalucía" y ha reclamado "un pacto nacional del agua y poder destinar los fondos Next Generation a inversiones en infraestructuras hidráulicas”.