Si vives en Málaga capital, este martes mientras comías probablemente hayas escuchado un fuerte estruendo procedente del cielo. El motivo no es otro que el ejercicio Eagle Eye, para el que el Estado Mayor de la Defensa ha convocado a las tres ramas de las Fuerzas Armadas de España.
Si bien el año pasado se celebró en la zona de Castellón, en esta ocasión, las maniobras se han trasladado hasta la Base Aérea de Málaga, es decir, a los alrededores del aeropuerto, el mar de Alborán y la Costa Tropical.
Aunque el ruido ha sido mucho más fuerte este martes, ya este lunes, probablemente, pudiste oír algún que otro avión pasando por encima del tejado de tu bloque, pues las maniobras comenzaron este día 12 y terminarán el próximo viernes, 16 de febrero.
En el despliegue participan 6 Eurofighters del Ala 14 desplazados desde la albaceteña Base Aérea de Los Llanos en misión QRA (Quick Reaction Alert o Alerta de Reacción Rápida). Los cazas se encargarán de las funciones asignadas a la vigilancia aérea con un total de 56 militares movilizados entre tripulaciones y personal de mantenimiento y apoyo.
¿Y qué objetivo tienen estas maniobras? Según explican desde Defensa en un comunicado, "mejorar la eficiencia en el desarrollo de las operaciones de presencia, vigilancia y disuasión" que suelen realizar cada día del año.
Por su parte, el Grupo Central de Mando y Control (GRUCEMAC), ubicado en la Base Aérea de Torrejón, será el encargado de ejercer la vigilancia del espacio aéreo. Para esta tarea, el GRUCEMAC empleará los datos proporcionados por los diferentes Escuadrones de Vigilancia Aérea y por los medios terrestres y navales.
La Unidad de Defensa Antiaérea (UDAA) ‘Hércules’ del Ejército de Tierra desplegará en los términos municipales de Motril, Salobreña y Torrenueva Costa y proporcionará defensa antiaérea, complementando la vigilancia del espacio aéreo de soberanía nacional.
En el caso de la Armada, la fragata ‘Cristóbal Colón’ trabajará en aguas del mar de Alborán con el cometido de integrarse en el sistema de defensa aérea, aportando capacidades de vigilancia y defensa antiaérea. Complementará la cobertura de los Escuadrones de Vigilancia Aérea y de la Unidad de Artillería Antiaérea desplegada.
Esta fragata pertenece a la serie F-100 y es la quinta de la clase ‘Álvaro de Bazán’. Su sistema de combate AEGIS, unido al radar multifunción SPY-1D, le proporcionan una gran capacidad de defensa aérea. La fragata multipropósito está optimizada para actuar como buque de mando y control en un escenario de alta y media intensidad, capaz de operar integrada en una flota aliada y de proporcionar cobertura a fuerzas expedicionarias.