Lejos de los buenos números con los que la actividad del puerto de Málaga cerró 2022, el ejercicio de 2023 deja unos parámetros ciertamente adversos. De acuerdo con el balance dado a conocer este viernes por el presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio, y el director del recinto, José Moyano, el tráfico total se ha desplomado un 42,6% respecto a la anualidad anterior. Eso no ha evitado que en términos económicos, el cierre del ejercicio sea positivo, con 20,9 millones de ingresos de explotación y 1,9 millones de euros de beneficios.

Tomando como referencia los datos aportados desde el organismo, de las 4,4 millones de toneladas de 2022 se ha pasado a unas 2,5 millones. Es especialmente llamativa la caída que se produce en la parte de contenedores. Este tráfico ha pasado de casi 2,4 millones de toneladas a apenas 309.224. O lo que es lo mismo, cae un 87%.

Rubio ha relacionado los malos datos recogidos en especial en la primera mitad del ejercicio con las crisis "geopolíticas" a nivel internacional, con mención especial a la guerra de Ucrania y a la tardía recuperación de China, que se ha dejado sentir en la parte de contenedores.

En el análisis del tráfico de mercancías destaca el crecimiento de las importaciones, con 21,3%. Sobre ello, el presidente del Puerto ha valorado la conversión de Málaga como referente en importación de frutas subtropicales. Y ello ocurre en un ejercicio en el que la producción propia se ha visto afectada a la baja, lo que ha obligado a importar subtropicales de Perú, Chile o Centroamérica, que posteriormente maduran en las empresas de la Axarquía.

Por el contrario, descienden las exportaciones, con un 24% menos. Un descenso que se vincula con el cambio de modelo comercial de la actual propietaria de la fábrica de cementos de La Araña, que ha optado por orientar su producción para el mercado interior

Frente a la caída de contenedores, suben un 9,9% los graneles sólidos, con 898.655 toneladas, destacando los productos agroalimentarios; y los graneles líquidos, con un 23%, aunque representan apenas 138.561 toneladas.  

Rubio ha puesto en valor el importante peso que Málaga tiene como centro de operaciones de vehículos, destacando los acuerdos alcanzados por la concesionaria del muelle polivalente, Noatum, con productoras de vehículos en Marruecos, Turquía y Japón. Esto ha hecho que 2023 haya cerrado con 65.580 vehículos (+45%), al tiempo que se dibuja una tendencia al alza en 2024.

Mejora de los cruceros

Entre los números positivos destaca el tráfico de cruceros. En 2023 hubo 300 escalas con 503.898 pasajeros, casi un 24% más que el año anterior. Rubio ha destacado la apuesta de MSC Cruceros por Málaga, con más de 100.000 cruceristas. "Tenemos excelentes conexiones con Europa pero no con América; la casi totalidad del pasajero es alemán, nórdico, francés", ha comentado.

En el plano económico, Rubio ha incidido en que a pesar de que ha sido un año "muy complicado", los ingresos de explotación se acercan a los 21 millones, "cerca de las mejores cifras históricas". Ello deja 1,9 millones de resultados antes de impuestos. 

El mayor porcentaje de los ingresos corresponde a los cruceros, con un 21% del total; le siguen las líneas regulares con el norte de África, con un 18%. "En el futuro este porcentaje debe ir creciendo", ha señalado el presidente del Puerto. Y llamativo el que el 11% de los ingresos de explotación corresponde a la náutica deportiva, sin que se haya ejecutado aún el puerto deportivo de San Andrés (pese a ello ya se están pagando tasas). 

"Los datos de los ingresos de explotación indican por qué hemos sido capaces de sortear un año complejo y es porque tenemos muchos ámbitos de acción que nos aportan ingresos y nos permite mirar al futuro con optimismo", ha declarado Rubio.

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