La delincuencia vuelve a incrementarse en Málaga. Y hablamos de los delitos que se han detectado, porque habrá otros de los que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado no hayan podido percatarse y, por tanto, estén fuera de las estadísticas oficiales. Según el Balance de Criminalidad publicado por el Gobierno, en Málaga se cometieron el año pasado 99.209 infracciones penales, lo que representa un 8,1% más que en 2022. Eso son 271 delitos al día de media.
Obviamente no todos los delitos son iguales. Se han disparado, por ejemplo, un 24,6% las agresiones sexuales con penetración contabilizándose 152 casos en la provincia el año pasado. Dicho de otra forma, hay una agresión sexual con penetración cada dos días.
Lo más llamativo, lógicamente, son los homicidios y los asesinatos. Hubo 15 en 2023, algo que cada vez sorprende menos en un territorio en el que tienen presencia representantes de todos los clanes mafiosos y que hacen continuos ajustes de cuentas entre ellos, como puede comprobar en las informaciones que cada sábado publica en EL ESPAÑOL de Málaga Roberto Cardesi. Si nos quedamos con las estadísticas, son un 12% menos que el año anterior. En este contexto cabe destacar que hubo 17 secuestros, un 42% más que en 2022.
El año pasado se produjeron, según las estadísticas oficiales del Ministerio del Interior, 3.400 robos con fuerza en domicilios, un 1,6% más. Eso implica 9 robos al día en viviendas. También se robaron 1.910 vehículos, un 9,6% más.
Lo más habitual es el hurto, el robo a pequeña escala que tiene una consideración legal diferente. En 2023 se incrementaron un 6,8% hasta los 26.884 en la provincia.
Por otra parte, el tráfico de drogas sigue fuerte en la provincia de Málaga. Se registraron más de 1.200 delitos por esta causa, un 13% más, y hay muchos más casos que no han sido detectados.
Porcentualmente hablando, lo que más crece son los delitos informáticos, algo lógico porque cada vez se producen y se denuncian más. Hubo 18.000 delitos de este tipo, un 52% más, de los cuales la inmensa mayoría corresponden a estafas informáticas.