El fin de la sequía no está a la vuelta de la esquina, su fantasma sigue golpeando a Málaga, pero las precipitaciones de estos primeros meses del 2024 han dejado un panorama que en este mismo período de tiempo de 2023 eran solo un sueño. 

En total, según los datos aportados por el Centro Meteorológico de Málaga sobre las lluvias registradas en la estación del Aeropuerto, se observa que las precipitaciones de marzo han salvado el cuatrimestre. En concreto entre el 1 de enero y el 30 de abril han caído 203 litros por metro cuadrado, es decir, el 89% de la media habitual que se sitúa en los 229 litros. 

Estas cifras están muy lejos de las que se registraron durante el primer cuatrimestre de 2023. En los cuatro primeros meses del año pasado cayeron un total de 74 litros por metro cuadrado. 

Por lo que, en estos últimos meses en el aeropuerto se han registrado un 63% más de lluvias que en el mismo tiempo de 2023. Concretamente, han sido 129 litros por metro cuadrado más los contabilizados este año. 

Al observar los datos mes a mes, cabe señalar que enero fue un mes seco puesto que se registraron 21 litros cuando la media habitual que se suele recoger en esa zona es de 62 litros por metro cuadrado. 

En el caso de febrero, las precipitaciones habituales ascienden hasta los 59 litros y en 2024 los datos señalan que han caído 29 litros por metro cuadrado. Por tanto este mes ha sido también seco, según Jesús Riesco, director del Centro Meteorológico de Málaga. 

En marzo llovió un 216% más de lo habitual

La situación cambió completamente con la llegada de marzo. En Semana Santa el cielo dejó de estar azul y las tan esperadas precipitaciones llegaron proporcionando un total de 143 litros por metro cuadrado en el aeropuerto de Málaga.La media de lluvias para este mes está en los 66 litros por metro cuadrado, por lo que en marzo en la capital ha llovido un 216% más de lo habitual. 

Para abril se esperaba también algo más de humedad, pero finalmente ha sido seco. En total se han contabilizado 10 litros por metro cuadrado, cuando lo normal es registrar en torno a 41 litros.

Este panorama, según Riesco, es “bastante más húmedo” que el vivido el año pasado, donde el déficit hídrico era mayor y las precipitaciones fueron mucho menores. En enero de 2023 se registraron 12 litros por metro cuadrado, en febrero fueron 55 litros, en marzo siete y en abril cero. 

Cabe recordar que abril de 2023 ha pasado a la historia como el más caluroso en Málaga desde que hay registros por varios motivos. En primer lugar, porque no cayó ni una gota de agua y, en segundo lugar, porque se batió el récord histórico de temperaturas máximas en dos días -el 10 de abril con 33,7 grados y el pasado sábado 29 con 34,3 grados en el aeropuerto de Málaga-.

Para Riesco marzo ha sido un mes “extremadamente húmedo”, lo que ha conseguido paliar un poco la sequía, pero incide en que Málaga todavía se encuentra en “sequía meteorológica”.

De igual forma, añade que los meses de precipitaciones abundantes han pasado y no se esperan grandes aportaciones hídricas en mayo, junio y julio. Además, considera que habrá que esperar al otoño para saber cómo evoluciona la sequía y cierra el año hidrológico 2024.

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