Por su parte, Francisco García Isla entre los retos a los que se enfrenta este sector, destacó la nueva ley de FP que se aprobó hace tres años, entra en funcionamiento en septiembre y “estamos casi en junio, tenemos que preparar el curso que viene y no sabemos qué decirles a los profesores”.
Además, señaló que con la ley al estar aprobada por el Gobierno, el siguiente paso es que las comunidades autónomas saquen sus propios decretos, pero no tienen noticias de la Junta de Andalucía. Por tanto, están en vilo sin saber cómo va a ser el curso que viene.
Al respecto, Manuel Agudo, coordinador general de FP de FP Pro, añadió que con esta nueva normativa ha cambiado todo. “Tenemos que ser DUAL, entren nuevas asignaturas y no sabemos cómo lo haremos, pero lo haremos”, apostilló.
Asimismo, hizo hincapié en que hay profesores "que no saben qué asignaturas van a dar o si van a poder impartir sus materias". Esto se debe a que al haber asignaturas nuevas, no pueden organizar los horarios, desconocen si alguna materia ha desaparecido o qué licenciaturas se quedan fuera de las permitidas para enseñar a los estudiantes algunas asignaturas.
En este sentido, Juan Antonio Aguilar, cofundador de FP Innovación, apoyó el discurso de sus compañeros de debate e incidió en que la administración pública debe dar a conocer la información lo antes posible para poder organizarse.
La FP, la puerta a la empleabilidad de los jóvenes
Por otro lado, Francisco García Isla, director académico del Grupo Educa (Medac y Masterd) aseguró que en los últimos años las familias han empezado a ver la Formación Profesional como “una opción de empleabilidad porque dura dos años y los estudiantes salen al empleo”.
En cuanto a las ramas más solicitadas, remarcó que están las que las familias demandan y las que pide el mercado, que son diferentes. Asimismo, explicó que “las familias quieren tecnología y sanidad y la hostelería no la demandan tanto porque piensan que, por ejemplo, para ser camareros no hay que estudiar”.
En relación con el perfil del estudiante, García señaló que cuentan con numerosos licenciados universitarios que han tomado la solución de estudiar una FP para tener más salidas profesionales. También tienen niños de 15 años que no saben si quieren estudiar, si ir a la universidad o no y deciden cursar una FP para empezar a indagar.
En cuanto a las ramas de estudio, Manuel Agudo, coordinador general de FP de FP Pro, destacó que existen familias “transversales y con un gran impacto”, pero también otras con gran interés empresarial como, por ejemplo, mecánica, instalación o mantenimiento de vehículos que “son profesiones que conocemos como tradicionales, pero tienen mucha demanda”.
En este sentido, al hablar de la universidad incidió en que “es complicado reinventarse con una carrera universitaria de cuatro años, pero con una FP es más fácil”. Por ello, consideró que la sociedad debe hacer una reflexión y pensar en “cómo vamos a tener a los jóvenes de hoy en día hasta los 30 estudiando y luego meterlos en contratos en prácticas”.
“La sociedad no nos pide un cambio tan académico, quieren más prácticas e incorporarse pronto en el mercado laboral”, señaló. Además, hizo hincapié en que se debe llevar a cabo ese cambio porque “Málaga avanza, va muy rápido y tenemos a Andalucía mirando y seguramente tendremos a España haciéndolo muy pronto”.
Así, Juan Antonio Aguilar, cofundador de FP Innovación, añadió que “Málaga es la capital económica de Andalucía y las empresas tienen que invertir como los equipos de fútbol en cantera”. Por ello, los centros educativos deben aportar recursos para cubrir su demanda.
“Las empresas están aquí y no paran de llamar. Ahora son ellos los que llaman y no nosotros, pero nos piden personas bien formadas”, aseguró Aguilar. Además, apuntó que hace falta un “orientador profesional para ayudar a los estudiantes a ver dónde se ven trabajando en el futuro”.
Con respecto a la demanda de las empresas, señaló que estas no miran la edad, sino que quieren personas con experiencia y una actitud de ir “hacia adelante”. De igual forma, incidió en que los centros se deben adaptar a la demanda porque “la FP puede aportar soluciones enormes de plantilla y de desempleo".
En cuanto a los docentes, remarcó que deben seguir formándose para ofrecer una buena educación a sus alumnos, algo de lo que no duda que se esté haciendo porque “los profesores de FP son como Macgyver. Con un clip y un chicle te fabrican la inteligencia artificial”.