El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, tienen la misma edad: 81 años. Para ser estrictos, Biden es un mes mayor porque nació el 20 de noviembre de 1942 y De la Torre el 21 de diciembre. Uno lidera el país más importante del mundo (con el permiso de China) y el otro una de las capitales más grandes y prósperas de España.
Obviamente, las responsabilidades no son las mismas. De la Torre no tiene un botón nuclear, pero las horas del día sí son iguales, 24, y aunque no estamos pendientes de cuál es la agenda diaria de Biden sí podemos asegurar que a la De la Torre le faltan horas porque quiere estar y está en todos sitios.
Se está hablando mucho de la salud de Biden tras el fiasco de debate televisivo contra Donald Trump y cada vez son más las voces que piden que se retire de la carrera electoral norteamericana. El último ha sido George Clooney.
En Málaga también se habla mucho de la edad de De la Torre, cada legislatura se le pregunta a él (y a su resignada mujer) si se presentará de nuevo y finalmente lo hace. Lleva de alcalde 24 años y, por ahora, le queda hasta 2027.
No obstante, todo apunta a que si hubiera una competición deportiva entre De la Torre y Biden el malagueño se lo llevaría de calle. El regidor se esfuerza además en cada acto en demostrar su fortaleza física y agilidad mental, saltando los escalones cuando va a dar un discurso o citando a todos y cada uno de los presentes con sus respectivos cargos, así como tirando de historias pasadas y presentes con alto grado de precisión. Así tranquiliza a los indecisos.
De la Torre es de los que lo prueba todo cuando va a algo. Le hemos visto subirse a patinetes, conducir coches eléctricos diminutos, etcétera. En el Ayuntamiento de Málaga se han puesto la misión de trasladar la imagen de un alcalde activo y conectado a los jóvenes a través de las redes sociales.
Lo último fue ayer en la inauguración de un parque deportivo público de 2.000 metros cuadrados en la zona este de la capital. De la Torre jugó a tenis de mesa, cogió pesas, se subió a una bici elíptica o tiró a canasta. Al final del vídeo publicado en X no se ve si la metió, pero desde el Consistorio confirman que sí entró, algo que se dejaba entrever por la reacción de los niños que lo veían. Que tiemble Biden que De la Torre le quita el puesto.