Eran cinco personas. Iban a los centros comerciales o las estaciones de tren de Málaga y miraban el pin de la tarjeta de personas que estuvieran realizando alguna compra. Posteriormente, aprovechando algún descuido, le robaban la tarjeta y se iban con ella a hacer compras o a sacar dinero del cajero.
La Policía Nacional los ha atrapado pero no irán,de momento, a la cárcel. El Juzgado de Instrucción Número Cuatro de Torremolinos les ha ordenado como medida cautelar la prohibición de aproximarse a menos de 500 metros a todas las estaciones de trenes, metro o autobuses de Málaga, así como a todos los centros comerciales de la capital.
¿Lo cumplirán? Está por ver. La Policía Nacional los ha detenido por delitos de hurto, estafa y pertenencia a grupo criminal. Además los cogieron in fraganti cometiendo un delito.
La investigación, llevada a cabo por agentes adscritos al Grupo Zonal de Hurtos de Málaga, se inició tras la detección de un incremento de denuncias por hurtos cometidos en la zona centro de Málaga y en las estaciones de tren de Cercanías de la capital y de La Colina en Torremolinos.
Se estableció un dispositivo policial de vigilancia que abarcaba toda la zona afectada y permitió a los agentes localizar a los presuntos autores.
Consta la participación de este grupo criminal en, al menos, siete delitos. En el momento del arresto llevaban encima varias prendas de ropa, un reloj de alta gama, 1.400 euros y un monedero procedente todo ello de este último hurto.
En un registro domiciliario practicado en la vivienda de uno de los investigados los agentes han intervenido además numerosa documentación probatoria de las infracciones cometidas.