El anuncio del Ministerio de Transporte de bonificar con hasta un 50% a los viajeros habituales de la autopista de la Costa del Sol, según datos del propio departamento, supondría un coste anual para las arcas estatales de 1 millón de euros. Una cifra que contrasta hasta el extremo con los hasta 81,6 millones de euros que este mismo jueves ha comprometido el Consejo de Ministros para ampliar los descuentos en la AP-9 de Galicia el año que viene.

Para medir el peso de ambas carreteras sirva recordar que la media de vehículos en la vía de la Costa del Sol fue de unos 37.000 diarios durante 2023, frente a los 25.500 de la infraestructura gallega.

Lo llamativo del caso es que, según se precisa, en el caso de la vía de pago gallega la pretensión es llevar del 20% al 50% la bonificación para los usuarios recurrentes que realicen como mínimo 20 viajes mensuales y paguen con telepeaje. Y, de igualmente, se eleva hasta el 50% a los vehículos pesados desde el primer viaje y con cualquier forma de pago.

Esta comparativa ha sido el detonante para que desde el Partido Popular e instituciones como la Junta de Andalucía y la Diputación provincial de Málaga se haya criticado con dureza el planteamiento realizado por el Gobierno central.

Para la presidenta de los populares malagueños, Patricia Navarro, lo sucedido constata "de nuevo el agravio" del Gobierno con Málaga, que opta por destinar los fondos reservados para transporte público sostenible "a cualquier otro sitio de España excepto a Málaga".

"No están dispuestos a apostar por Málaga. Sólo así se explica que la cantidad destinada a las bonificaciones para los usuarios de la AP-7 sea un millón de euros al año. Es ridículo", ha denunciado.

En esta misma línea se ha pronunciado el presidente de la Diputación, Francisco Salado, quien con el paso de las horas ha ido endureciendo su discurso, hasta hablar de "tomadura de pelo" por parte del Gobierno. 

A su juicio, las inversiones que se han planteado son "ridículas", en tanto que, bajo su criterio no abordan los problemas y vuelven a constituir "un enorme agravio para nuestra provincia". 

"Sólo así puedo calificar que el Gobierno proponga destinar un presupuesto de un millón de euros para bonificaciones de la autopista de peaje de la Costa del Sol; aspiramos a que se bonifiquen el 100% o cerca del 100% los trayectos frecuentes por motivos de trabajo o estudios, no a que nos den una limosna ridícula", ha criticado. Según sus cuentas, con el millón apuntado por el Gobierno "apenas da para ocho céntimos de bonificación por coche". 

Desde la Junta de Andalucía, la consejera de Fomento, Rocío Díaz, ha abundado en ello. "No queremos ser más que nadie, pero tampoco menos y no puede ser que se planteen bonificaciones  en la AP-7 que ellos mismos concluyen que tendrán muy poco impacto y cuando aplican bonificaciones mayores en otros territorios de España", ha dicho.