El cierre del año ha conocido una de las operaciones de mayor impacto nacional e internacional de los últimos tiempos: la compra de la sociedad La Zagaleta por parte de un grupo empresarial de Emiratos Árabes Unidos. Aunque no han trascendido por el momento cifras económicas, es fácil presumir que el montante es de una envergadura mayúscula. En particular, porque la adquisición deja en manos de la entidad compradora, Modon Holding, un enorme imperio inmobiliario en una de las mayores urbanizaciones de lujo de toda Europa.

La adquisición no sólo afecta a lo mucho ya desarrollado en las enormes extensiones de suelos de Benahavís, emplazamiento privilegiado situado a pocos kilómetros de la Costa del Sol, sino también a lo que aún queda por materializar. 

De acuerdo con los datos manejados por EL ESPAÑOL de Málaga, los nuevos propietarios de La Zagaleta disponen de unas 75 unidades de suelo residencial por materializar, con una superficie estimada de 500.000 metros cuadrados y un techo edificable de 75.000 metros cuadrados. 

A estas piezas de enorme valor, sobre las que se pueden levantar villas que en el mercado pueden alcanzar varias decenas de millones de euros, hay que agregar un gran proyecto hotelero con 210.000 metros cuadrados de extensión y una posibilidad de edificación de 23.000 metros cuadrados.

Según los datos aportados por Modon en la nota de prensa en la que ha informado de la compra de La Zagaleta, esta urbanización abarca casi 900 hectáreas de terreno, con capacidad para más de 400 villas y parcelas de lujo, dos campos de golf, otras tantas casas club para socios que incluyen restauración, un centro ecuestre, un helipuerto privado e instalaciones deportivas.

Esas son las piezas por completar en el entorno de Benahavís. Y se completan con otra joya inmobiliaria: Majarambuz. Este espacio es conocido como Valderrama II, y forma parte del plan de desarrollo de Castellar, adyacente a Sotogrande (Cádiz). Es una reserva de suelo de 2,2 millones de metros cuadrados (incluidas zonas verdes protegidas) que se encuentra en proceso de urbanización.

Hace ahora casi año y medio, desde La Zagaleta se informó de la contratación del prestigioso arquitecto Tom Doak para diseñar del nuevo campo de golf que se construirá sobre este espacio. Contará con entre 18 y 36 hoyos. La idea es que para poder practicar en estas instalaciones habrá que contar con invitación y convertirse en miembro será "notoriamente exclusivo". 

Majarambuz está llamado a ser uno de los complejos de golf "más desafiantes del mundo". Por ello, el club exigirá a sus clientes un hándicap medio-bajo para jugar en el campo, lo que consolidará aún más su condición de objetivo particular para jugadores de alto nivel.

Otro factor que contribuye a la exclusividad de Majarambuz es su ubicación, al estar las fincas completamente rodeadas de terrenos protegidos. El club estará situado en una zona apartada de Castellar/Sotogrande, y el acceso al campo estará limitado a los socios, sus invitados y los usuarios del hotel y las residencias de marca del resort.

Impacto económico

Para poner de relieve el impacto económico de La Zagaleta y las operaciones que se llevan a cabo en la urbanización sirva decir que, de acuerdo con las cuentas oficiales de la entidad, en 2023 se produjo la venta de tres parcelas por 7,6 millones de euros, mientras que en 2022 la sociedad vendió una parcela y vivienda por 7.177.419 euros. Además, se vendieron parcelas por 3.551.000 euros. 

Desde 1990, la inversión realizada en esta urbanización (excluyendo viviendas y hoteles) ha sido de 55 millones en infraestructuras y sistemas generales; de 33 millones en instalaciones deportivas. Y en lo que a la vivienda se refiere, se habla de unos 800 millones de inversión, ya sea en operaciones realizadas por el promotor o por terceros.

Modelo de negocio

El modelo de negocio de La Zagaleta ofrece la posibilidad de adquirir el terreno o bien villas ya construidas por la propia entidad para entrar a vivir, que son acondicionadas a las especificaciones del comprador. Asimismo, cuenta con la mayoría de los mandatos exclusivos del mercado secundario de viviendas terminadas, villas que son renovadas, adaptando su arquitectónica y tecnología a los más altos niveles del mercado.

Y aunque la imagen que se tiene de la urbanización suele centrarse únicamente en la última villa vendida por varias decenas de millones de euros, la realidad es que todos sus habitantes tienen una amplísima gama de servicios añadidos.

Uno de ellos es el Club de Socios, que cuenta con dos restaurantes, el centro ecuestre con 23 establos y 4 pistas, canchas de tenis y helipuerto. Otro de los grandes privilegios es que disponen de servicio permanente de traslados en helicóptero para los propietarios de La Zagaleta y los miembros del club de campo. 

Procedencia de sus residentes

Pero ¿quién puede permitirse vivir aquí? Los huéspedes son, principalmente, "altos directivos, profesionales de éxito que buscan un sitio exclusivo con un perfil de baja o nula exposición". En cuanto a la procedencia, hasta hace algo más de un año, el 28% era de Reino Unido, un 12% de Alemania, un 13% de Rusia y otro 18% de Suiza, Dinamarca y norte de Europa. El resto se reparte entre españoles, árabes y otras nacionalidades. 

Lo que sí se aprecia desde la pandemia de la Covid es un cambio generacional en el cliente. Ahora son muchos los jóvenes de entre 35 y 40 años, relacionados profesionalmente con la tecnología, renovables, sistemas, energía e innovación, que optan por comprar en La Zagaleta.