Antonio Cánovas del Castillo y Vallejo le dedica una escueta entrada a Picasso en sus Apuntes para un diccionario de pintores malagueños del siglo XIX donde escribe mal su apellido por error (aparece Picano). "Discípulo de Muñoz Degrain, exhibió en 1897 Ciencia y Caridad, que le valió Mención honorífica, y en 1899 Un Patio de una casa de Aragón. Concurrió a la Exposición de 1901", resume. Quién podría imaginar en ese momento la enorme proyección que tendría más tarde el artista malagueño.

El fotógrafo publicó este libro en 1908 como antesala de un estudio que preparaba sobre pintores, escultores y arquitectos malagueños con motivo de los Juegos Florales. Se trata de un glosario preñado de anécdotas con más de 30 autores (13 de ellas pintoras). El empresario y mecenas Félix Martín Rojas, a través del European Pictorial Sculptural Center, lo ha reeditado en formato facsímil con la ayuda de la Fundación Unicaja, Cervezas Victoria y Diario SUR. 

Respecto a la entrada sobre Picasso escrita cuando el creador ya había desarrollado su etapa azul y la rosa, Rafael Valentín de Unicaja ha dicho que hay que entender el contexto en el que se desarrolla el proyecto. "Es un libro que parte de las experiencias vitales de un autor que se codea con los principales pintores en activo de la ciudad. Picasso ya no vive en Málaga y era totalmente desconocido en España. Sólo un pequeño grupo de críticos de Barcelona y París lo conocía", ha señalado.

Al leer los apuntes critico-biográficos, el sobrino del político con el mismo nombre recuerda la simpatía y solera de Denis Belgrado a pesar de su sordera: "La gracia andaluza que tantos derrochan en la conversación, la tenía aumentada y en tercio y quinto [...] Era, aunque al parecer callado y corto (como todos los sordos), un hombre de mucha chispa, y que se servía de colores para expresar las más atrevidas agudezas".

Cánovas del Castillo también explica con gracia las obras de algunos artistas como El copo de José Blanco Coris, que media nueve metros de ancho por cuatro de alto. "Hubo quien tardó tres días en recorrer con la vista el cuadro de una punta a otro. Los pescadores que tiraban de la red eran de tamaño natural, y el mar era aún mayor que el natural", relata.

Este libro tan sólo contó con 100 ejemplares cuando se publicó hace una década en Madrid. Ahora ven la luz 3.000 facsímiles gracias a la iniciativa, que se ha presentado este jueves en el Museo Thyssen de Málaga. Sergio Ragel, encargado de las relaciones institucionales de Cervezas Victoria, ha dicho sentirse "ilusionado" al formar parte de este proyecto, "un claro ejemplo de algo pequeño en tamaño pero grande y rico en valor histórico". 

Estos apuntes escritos con una pluma afable, divertida y curiosa reúnen "un notable acopio de noticias, títulos y fechas; y recogen las anécdotas y la vida de personas como este autor que vivió 25 años la pintura malagueña del momento", ha precisado Valentín. El facsímil recupera la relación de pintores que Antonio Cánovas del Castillo y Vallejo elaboró a partir de sus apuntes de crítica de arte.

El autor incluye un apéndice final dedicado a cuatro grandes pintores no nacidos en Málaga, pero con trayectorias fuertemente vinculadas a la provincia: Ferrándiz, Simonet, Muñoz Degrain y Martínez de la Vega. Entre los malagueños reseñados se encuentra el universal Pablo Ruiz Picasso, que comparte página con su padre, José Ruiz Blasco, y al que curiosamente el autor solo dedica escasas líneas.

También Moreno Carbonero, que sí encuentra amplio espacio entre las páginas de apuntes. No faltan en ellos otros ilustres nombres de la pintura decimonónica malagueña como José Nogales Sevilla, Guillermo Gómez Gil, Horacio Lengo, Emilio Ocón o Verdugo Landi.

El libro pretende ser la base de futuros proyectos bibliográficos de mayor envergadura. Con la nueva publicación también nace el deseo de elaborar una obra definitiva de consulta en la que se recojan los principales pintores que ha alumbrado Málaga y su provincia a lo largo de la historia, incluyendo a aquellos que sin nacer en la región hayan desarrollado su carrera en ella.

Biografía

Antonio Cánovas del Castillo Vallejo (Madrid, 1862-1933), más conocido como Kaulak, cursó la carrera de Derecho. Pero siempre tuvo una vocación artística que, bajo la dirección de Carlos de Haes, le hizo dedicarse a la pintura inicialmente, firmando sus obras bajo el anagrama Vascano. Atraído también por el periodismo, llegó a ser director de La Correspondencia de España Ilustrada y ejerció la crítica de arte en La Época.

Destacó especialmente en el mundo de la fotografía, siendo considerado maestro del retrato y pionero del pictorialismo en nuestro país. En 1903 fundó la revista ilustrada La Fotografía y abrió en la capital un estudio bajo el nombre de Dalton Kaulak. También tuvo tiempo de cultivar la música, siendo autor de más de una decena de piezas, y la literatura y el ensayo, abordando diversos géneros. Unas inclinaciones artísticas que no le impidieron su activa participación en la política nacional, ejerciendo como diputado a Cortes y gobernador civil de Málaga.