La última gira de Manuel Carrasco, La cruz del mapa, fue galardonada como la mas exitosa de 2019. Se trató de un hito sin precedentes donde el artista onubense llegó a llenar el Wanda Metropolitano de Madrid y el Estadio Benito Villamarín de Sevilla, entre otras muchas ciudades. El cantante ha vuelto este fin de semana a la carretera con una gira renovada tras dos obligados aplazamientos.

Carrasco ha cerrado un total de 19 fechas por toda la geografía española, incluida Málaga el próximo 28 de mayo en el estadio de atletismo. El extriunfito estará cinco meses dando conciertos sin parar 5 meses, finalizando en Sevilla el 11 de junio con un directo para 72.000 personas en el Estadio de La Cartuja (concierto que se agotó en menos de cuatro horas de ponerse a la venta).

"Éramos conscientes de que esta gira no podía mantener el concepto con el que fue pensada hace dos años. Entendemos que el público que lleva conservando durante mas de dos años sus entradas merece nuestro esfuerzo creativo para motivar este regreso y celebrarlo por todo la alto. Ojalá y sea ahora cuando podamos vivir ese momento que tanto tiempo llevamos esperando", ha reconocido el artista, que regresa a los escenarios bajo la premisa de que "hay que vivir el momento".

Para esta nueva gira se ha generado un nuevo contenido de video para todo el espectáculo. Además cuenta con un nuevo sistema de sonido, luces y vídeo, así como un sistema de velocidad variable. Si se compara el anterior tour de 2019, gira que fue galardonada como la mejor del año, se han añadido mas de 140 cabezas móviles y 335 módulos de pantalla de video de alta definición. Mas de 60 personas forman parte del equipo de la gira.

Carrasco resurge en este nuevo comienzo con un nuevo repertorio, arropándose de una renovada producción, tanto o más espectacular de la que pudimos disfrutar en 2019. El mensaje que se quiere lanzar al mundo en esta vuelta a los escenarios es claro: un reencuentro con nosotros mismos en el que cada segundo cuenta, cada momento vivido, un mensaje lleno de optimismo y con la vitalidad que la pandemia nos quiso arrebatar.