La presencia del Museo Estatal Ruso en plena invasión ordenada por Vladímir Putin en Ucrania tiene al mundo de la cultura de Málaga dividido. Algunos se preguntan si deben continuar abiertas estas instalaciones. El alcalde, Francisco de la Torre, señalaba que, sin duda, sí porque la cultura "es el mejor antídoto contra la barbarie". Mientras, la concejal de Cultura, Noelia Losada, cree que cuando acabe la actual exposición, el 24 de abril, si sigue el conflicto, no se debe renovar.
Desde EL ESPAÑOL de Málaga abrimos una ventana a la opinión de agentes relevantes de la escena cultural de la ciudad. Dos representantes de la Universidad de Málaga y dos importantes figuras de la gestión cultural en Málaga.
Una pregunta y cinco respuestas: ¿Qué cree que debe hacer Málaga con respecto al Museo Ruso en plena invasión de Ucrania?, Tecla Lumbreras, José María Cabra de Luna, Carmen González-Román, Enrique Quero Gervilla y Mariano Vergara.
Tecla Lumbreras
La vicerrectora de Cultura de la Universidad de Málaga declara que "optaría por cerrarlo temporalmente como un acto simbólico y una forma de pronunciarnos sobre la guerra". "Está muriendo gente. Aunque parezca una barbaridad, yo lo haría", reconoce. Lumbreras también critica el espacio debido a su condición de "museo franquicia por el que pagamos por la marca un pastón, solamente por llamarse museo de San Petersburgo".
Lumbreras indica que ese "dinero que pagamos va a Rusia". "Cada exposición que viene de allí cuesta un dineral de las arcas públicas entre transporte, seguros, etc. Mientras los artistas pequeños, medianos y de largo recorrido no tienen espacios para exponer en esta ciudad", reprocha.
"Antes de la invasión rusa y a raíz de la pandemia pensé mucho en que las personas no tenemos memoria. Todo se va repitiendo cíclicamente. Espero que tengamos unos felices años veinte antes de otra guerra mundial", desea.
Por último, no considera que un cierre de la Colección del Museo Ruso en Málaga pueda considerarse censura: "Los artistas expuestos no están vivos" y considera "que con esta agresión evidentemente está sufriendo el pueblo ruso, no sólo los ucranianos. Te ves metido en una guerra y un conflicto que nadie se esperaba. Al final, los hombres siempre se salen con la suya".
José Manuel Cabra de Luna
El abogado, pintor, coleccionista y académico considera que "si Málaga cerrara el Museo Ruso, el Pompidou de París tendría que empezar por quitar todos los cuadros de Kandinsky, Malevich y Chagall que tiene". "Una cosa es el arte y otra cosa muy distinta es la política y la locura de un gobernante en un momento dado", diferencia.
Cabra de Luna cree que no hay que tener "una torpe manera de mirar" y a su juicio "cerrar el museo sería colocar la política en un lugar donde no le corresponde. Gabriel García Márquez era íntimo amigo de Fidel Castro. No me gustaba ni me gusta, pero por eso no voy a dejar de leer Cien años de soledad o El coronel no tiene quien le escriba".
"Las agresiones que está sufriendo Ucrania a manos de Rusia no las hace el pueblo, sino los malos políticos y los que tienen una sed de imperios y territorios. Sale de una mala ideología, de un mal entendimiento de las ideas, de los países y de la historia". Es decir, que para el poeta "el arte no es que tenga carta blanca, el arte está en otro plano de las cosas".
Para gestor cultural, relacionar el Museo Ruso con estar de acuerdo con Putin es "fruto de un reduccionismo mental, sacar las cosas de quicio". Y se cuestiona: "¿Quién tenga un coche ruso tiene que devolverlo? ¿El que tenga un avión ruso en su flotilla debe dejarlo aparcado en el aeropuerto hasta que la guerra se termine y no se diga que le está haciendo el favor a la industria rusa? Lo que no está bien es aprovechar desgraciadas circunstancias sangrientas para hacer política o censurar".
Carmen González-Román
Esta profesora Titular de Historia del Arte de la UMA y vicedecana de Estudios de la Facultad de Filosofía y Letras considera que "desgraciadamente, como estamos comprobando estos días, hay líderes políticos que ignoran la historia y se desentienden de los desastres que ocasionan las guerras a todos los niveles".
"Los que estamos implicados en el mundo de la cultura debemos ser muy conscientes de las consecuencias nefastas de los radicalismos ideológicos y de las atrocidades que se han llegado a cometer contra el patrimonio cultural en situaciones bélicas. Por ello, considero que tenemos la obligación moral de posicionarnos en todo momento en la defensa y conservación de cualquier bien patrimonial", señala la coordinadora de la revista de crítica de arte Apuntes de Arte.
Concluye González-Román: "Un museo o una colección de arte, como es el caso de la Colección del Museo Ruso en Málaga, no debería emplearse como instrumento para represaliar una invasión de un estado soberano, aunque esta sea sin duda una acción absolutamente reprochable que está acometiendo el gobierno ruso contra la nación ucraniana".
Mariano Vergara
Vergara es uno de los referentes culturales de Málaga y considera que "con las consecuencias que pueda traer y teniendo en cuenta que yo pienso que el Museo Ruso es casi el mejor que hay en Málaga por muchas razones. Esta es una ventana abierta y una plataforma activa y pasivamente. Yo he aprendido mucho del arte ruso que desconocía y ellos además tienen una plataforma de mostrarse al mundo".
Tras esta primera reflexión, afirma que "la postura que hay que tomar es la de cerrar el Museo Ruso entretanto el ejército ruso esté ocupando Ucrania. Es un país soberano, independiente, admitido en la ONU hace años… Todos los que escriben sobre que es una creación de Lenin y de Stalin es que no conocen la historia rusa".
Por otro lado, no duda en indicar que "el arte engrandece las mentes" y pone como ejemplo el Cuadrado negro sobre fondo blanco: "¿Cuándo íbamos a ver aquí esa obra de Kazimir Malevich? Esto es importantísimo. Pero hay determinadas cosas con las que no se puede jugar. Con el ser humano no se puede jugar, y es lo que está haciendo Rusia en Ucrania".
Enrique Quero Gervilla
El director del Centro ruso de la Universidad de Granada piensa que en "una situación tan lamentable y delicada como la que estamos viviendo, la cultura es el elemento de cohesión más potente que existe y, además, el único que trasciende a los pueblos y a sus dirigentes".
Para el doctor en Gramática contrastiva e histórica por la Universidad Estatal Lingüística de Moscú, "es lamentable que esta situación destruya los vínculos que se han forjado a lo largo de décadas de trabajo".
"El Museo Ruso es un lugar de encuentro único que sitúa a Málaga en la vanguardia del arte a nivel mundial. En definitiva, creo que cerrarlo sería un perjuicio para ese intercambio cultural tan necesario en nuestros días", asevera el catedrático de Universidad del Departamento de Filología Griega y Eslava de la UGR.