Tras la asamblea histórica celebrada este lunes por la noche por parte de la Asociación de Carnavaleros Malagueños (ACMA) y la Asociación de Autores del Carnaval de Málaga (ACAM), ambas entidades han decidido realizar un comunicado para manifestar con detalles cuáles han sido los motivos que les han llevado a romper cualquier vínculo con la Fundación Ciudadana Carnaval de Málaga (FCCM) y, por ello, con el antiguo patronato.
En primer lugar, han querido hacer hincapié en que la decisión de no participar en los actos de la Fundación no tiene nada que ver con "razones personales contra ninguno de los actuales integrantes de la misma, sino contra el modelo de dicha institución, el cual consideramos caduco y poco democrático".
Desde la ACAM y la ACMA denuncian que los carnavaleros que se dejan el alma por el carnaval año tras año no tienen opción para "decidir democráticamente quién debe regir la institución" ni "cuál debe ser el futuro de la fiesta". Así, han manifestado su rechazo a no poder acceder a los presupuestos y estados de las cuentas de la Fundación ni poder votar en asambleas por las diferentes iniciativas o proyectos a realizar. "Es por esto por lo que no queremos seguir siendo partícipes de las actividades que sean organizadas por la FCCM. Este es el principal motivo de que hayamos optado por ser nosotros mismos los que decidamos, de una vez por todas, nuestro futuro", han señalado.
De igual forma, apuntan que se trata de una "decisión meditada y cargada de responsabilidad y compromiso, pensando ante todo en el Carnaval que dejaremos a futuras generaciones". Insisten en que "el Carnaval es del pueblo y para el pueblo, por lo que todo lo que no sea aprobado por el pueblo, en este caso por todos los que participan de una manera u otra en el Carnaval, no nos parece adecuado, ni democrático ni transparente".
Por otro lado, aclaran que la decisión no es "óbice para que las distintas agrupaciones que componen ambas asociaciones no vayan a hacer Carnaval en 2023". Todo lo contrario. Han anunciado que los ensayos de los grupos de canto continúan "a pesar de la desilusión que podría suponer esta situación, por lo que podemos asegurar que Málaga tendrá Carnaval, en fecha y forma que determinaremos próximamente".
Como recalcaban en el primer punto, la decisión, en sus propias palabras, "no tiene una razón personal", por lo que no cierran la puerta "a nadie que quiera trabajar por la fiesta sin ningún tipo de distinción o pasado". "Nuestras puertas están abiertas a todo el que quiera sumar por el bien de nuestra fiesta", han informado.
En el comunicado, también han querido agradecer al Ayuntamiento de Málaga el interés manifestado para encontrar solución a esta problemática. Y al resto de malagueños han lanzado un mensaje claro: "Como dijimos hace un año, no vamos a dejarlos vivir sin nuestras coplas, ni vamos a morir en vida por no cantarles. Durante 40 años hemos alzado la voz para cantarle a la mejor ciudad del mundo, Málaga. Ayer alzamos la voz para pedir democracia".