Si Mariah Carey con la llegada de noviembre anunciaba que quedaba muy poco para la Navidad gritando "It's timeeeeeeeeeee!" bajo los sones de su mítico All I Want For Xmas Is You; en Málaga, con el inicio del mes de enero y la retirada de los Reyes de Magos hacia Oriente, comienza a sonar otro himno: "Ven a bailar, cantemos juntos que llegó el carnaval / Mi niña Málaga se pone el disfraz".
El próximo 27 de enero, comienzan las preliminares del Concurso Oficial de Agrupaciones de Canto del Carnaval de Málaga y una joven carnavalera de apenas 19 años, llamada Luci López, se ha propuesto convertirse en la 'Carey' de la Fiesta del Invierno Cálido creando una peculiar cuenta atrás, que está gustando incluso más que el calendario de chocolate de cualquier supermercado en Navidad a los más golosos.
Luci, de la mano del fotógrafo Franciscocisco Hinojosa, ha creado una cuenta de Instagram llamada @eternofebrero. Desde el día 1 y hasta el próximo día 27, ambos irán subiendo imágenes de niños y jóvenes de la cantera disfrazados con tipos clásicos del Carnaval de Málaga que servirán para ir restando días hasta el inicio del concurso. De igual forma, en sus cuentas personales de Twitter también comparten las fotos.
"La idea surgió de una manera muy tonta. Estando en el hospital, me pusieron un relajante muscular y no podía moverme. Me dio por pensar mucho, puesto que no podía hacer otra cosa, y todo fue fluyendo. Soy muy fantasiosa, conozco a mucha gente y se me va la cabeza muy rápido, así que todo fue una cosa detrás de la otra", explica López.
Fue llamando a compañeros de la fiesta que se han acabado convirtiendo en amigos para ella con el paso de los años. "Se lo dije a esos que sabía que se apuntaban a un bombardeo a modo de cachondeo; ni de lejos imaginaba que iba a llegar la iniciativa tan lejos", añade.
El calendario fotográfico fue construyéndose los días 27, 28 y 29 de diciembre. Tras contactar con Fran Hinojosa para que fuese su fotógrafo, conseguir a los protagonistas de las fotos -niños y jóvenes carnavaleros- y los disfraces de los grupos, solo faltaba algo: el estudio.
"No habíamos caído en lo más importante, pero la verdad es que fue fácil encontrar un lugar para hacer las fotos y maquillar a los modelos. Llamé a Paqui Prieto, 'la reina mundial' y pregonera de este año, por si podía cedernos la peña donde ella ensaya con sus niños. Me dijo que me llamaba en un momento y a continuación, apenas cinco minutos después, me soltó de sopetón que podía hacerlo en la Casa del Carnaval. ¡No me lo podía creer!", continúa Luci.
Desde que Luis Bermúdez les abrió las puertas durante la primera jornada de fotografías hasta el último, la joven carnavalera asegura que vivió una "experiencia única" creyendo que vivía en "una simulación". "No concebía el hecho de que una idea mía estuviera llegando a tanta gente", confiesa.
Los disfraces de los grupos que aparecen en la cuenta (hasta ahora Los Patronos, Los Malagüitas, Los Malafama, La Amada Invencible, Musicalandia, La Venganza Se Sirve Fría, El País de Siempre Quizás y Este Mundo Loco) no han sido elegidos por algo en concreto, según la propulsora de la idea, sino porque "hemos seleccionado tipos que o bien teníamos en casa o que podían prestarnos porque conocíamos a gente de ese grupo". "El orden en el que van apareciendo en el calendario va acorde con la pequeña historia que ponemos en el pie de foto, todas tienen relación para enganchar a los que lo vean", explica.
"Me he rodeado de un equipo tan bueno que todo ha sido fácil", presume López, que eligió a Hinojosa como fotógrafo del proyecto por "el trabajo tan brillante que hace siempre en la fiesta". "Creé vínculo de amistad con él, retomamos el contacto hace unas semanas y se lo propuse. Me dijo que sí al momento y la verdad es que Hinojosa hace magia con la cámara. Pese al estrés por ejemplo del primer día, ha quedado precioso", relata.
Mientras que Luci maquillaba a los niños, él iba sacando fotos y editándolas. Un tándem joven y muy bien coordinado cuya iniciativa ha recibido el aplauso del mundo carnavalero. "Si gracias a esto que hemos hecho nosotros motiva a que otros niños lleven hacia delante otras propuestas, yo muero de amor", confiesa la joven entusiasta de la fiesta.
El trato con los niños le resultó muy sencillo. "Yo soy canterana. Me da igual los años que tenga, que yo me quedo con mis niños, me dan mucha vida", dice. Además, asegura que esta experiencia le ha demostrado que los más pequeños son "capaces de todo". "Debemos darle a los niños la oportunidad de aprender desde la cuna. Vivimos por y para las redes sociales y creo que es la mayor fuente de difusión que podríamos tener para promover y publicitar la fiesta de la manera que se quiera. A mí me encantaría llegar a los colegios e institutos, hasta a los niños que están con el pavo, porque durante los años de la ESO se pierden muchos posibles carnavaleros", sostiene.
Ella define el proyecto como "jugar como una niña en el parque" y el hacer partícipe a la cantera, a 'sus niños', le produce siempre "papelillo en la barriga". Así, reconoce que está abrumada con la acogida. "Estoy muy agradecida por el equipo que me ha prestado Momo, porque la fundación me haya dado la oportunidad de hacerlo. He cumplido un sueño que no sabía que tenía y ya estamos viendo cómo hacerlo para el próximo año", zanja.