Valentina tenía cuatro meses. Sus ojitos azules y su sonrisa daban la vida a sus jóvenes padres, Carmen y Juan Carlos, que la perdieron el pasado 24 de septiembre para siempre. Valentina era una niña sana, no tenía ninguna patología, pero a mediados de septiembre sus progenitores vieron que algo no iba bien. Las fiebres altas no se le retiraban.
Empezó entonces un ir y venir constante a los hospitales. Hasta ocho veces en menos de una semana acudieron al Materno Infantil y al Hospital Quirón de Málaga, según su madre. Un resfriado o una mancha en el pulmón, algunos de los diagnósticos que le dieron los médicos, y que los padres no terminaban de entender, debido a que Valentina cada vez empeoraba más llegando a sufrir vómitos.
Totalmente "lacia y con los ojos vueltos", como declaró en septiembre su madre, la pequeña entró al hospital el 23 de septiembre, donde fue ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos del Materno de urgencia. Allí mismo murió diez horas después tras realizarle varias pruebas como una hemodiálisis y ser entubada. Según su madre, la pequeña sufrió hasta tres paradas cardíacas.
Todo apuntaba a que la menor habría sufrido una septicemia, una infección en la sangre, a causa de un virus o bacteria, tras tantas idas y venidas al hospital. Los padres de la pequeña Valentina pusieron su caso en manos de la justicia, por un presunto delito de homicidio imprudente o posible caso de negligencia médica con el objetivo de "evitar que ninguna madre pierda a su hijo" igual que la perdieron Carmen y Juan Carlos.
Ahora mismo el caso se encuentra en el Juzgado de Instrucción. El abogado de la pareja, Juan Manuel Medina, explica a este periódico que se encuentran "a la espera" de diligencias solicitadas por el Juzgado.
"Serían el informe definitivo de la autopsia, que de momento no lo tenemos, pruebas toxicológicos y una pericial que se encargó en el momento al Instituto de Medicina Legal para determinar si se puede hablar de negligencia médica o no. En cualquier caso, todo depende de estas pruebas toxicológicas y el informe, que pueden tardar entre seis meses y un año normalmente", declara Medina.
Un bonito recuerdo
Este Martes Santo, la Virgen de Nueva Esperanza irá acompañada de Valentina. Una amiga íntima de la familia permitió que durante este Lunes Santo la mamá de Valentina pudiera colocar bajo el manto de la imagen el chupete que utilizaba la pequeña. "Mi princesa va a acompañar a la Virgen de Nueva Esperanza hoy", declaraba Carmen.
Está siendo una Semana Santa agridulce para la familia. Pese al sufrimiento y al dolor por Valentina, la familia ahora está de enhorabuena por una noticia que han recibido recientemente: esperan un bebé. Carmen define a este pequeño o pequeña como un "bebé arcoíris", después de que la vida les quitara a Valentina.
Este Miércoles Santo la joven acompañará a la Hermandad de Mediadora como nazarena del Redentor del Mundo. "Voy a salir de penitencia para darle las gracias por volver a quedarme embarazada, por este bebé arcoíris, una estrella que me ha mandado mi Valentina. No sabemos el sexo, pero que lo que venga sea con mucha salud", ha explicado a EL ESPAÑOL de Málaga la joven.