En junio de 2018, Pablo Atencia fue reelegido presidente de la Agrupación de Cofradías de Málaga con 142 votos a favor, 29 en blanco y una papeleta nula. El resultado que salga tras los comicios del próximo 2 de octubre será muy diferente. No solo porque Atencia abandona el cargo después de ocho años al frente, sino porque el sistema que se había venido empleando en las votaciones hasta ahora va a cambiar por completo.
La entrada en vigor de los nuevos estatutos, iniciada durante la presidente de Rafael Recio y aprobados en 2019 (ratificados por el Obispado en 2020), ha supuesto una importante modificación en este sentido.
Ya no será la Asamblea de delegados la que lleve a cabo la votación, sino la Junta de Gobierno con carácter extraordinario. ¿Qué quiere decir esto? Que en el pasado, tenían derecho a voto un total de 205 personas (los hermanos mayores, más los cuatro delegados -o representantes- de cada corporación-), mientras que ahora solo serán 41 los integrantes del censo.
Así, cada hermano mayor entregará un sobre cerrado que incluirá, para ser considerado válido, nota firmada por el secretario de la hermandad, con el visto bueno del hermano mayor y el sello de la corporación, que certifica que el voto que se incluye es el acordado por dicha cofradía.
Dicho voto irá en sobre neutro, sin ningún dato identificativo exterior, debidamente cerrado y se depositará en la urna de elecciones. Se emitirá un voto por Cofradía agrupada y será potestad de cada hermano mayor determinar a quien compete la decisión para la emisión de dicho voto, pudiendo elegir que sea entre los representantes de la hermandad en la Agrupación (representante nato y los delegados) o entre cualquiera de los órganos colegiados de la hermandad. Es decir, que se da la opción a que los miembros de la junta o el cabildo puedan participar en el proceso.
Será elegido el candidato que obtenga la mayoría simple de los sufragios recabados, en lugar de la mayoría absoluta establecida hasta ahora, no pudiendo presentarse más de dos candidaturas a las elecciones, ya que se requieren 14 avales mínimo.
En el caso de que se produjera un empate, el candidato que acumule un mayor número de años como delegado o representante de la Agrupación se proclamaría presidente, cuyo periodo de mandato se ha ampliado de tres a cuatro años y podrá permanecer hasta un máximo de ocho años si fuera reelegido.
No hay que olvidar que en el pasado, no todos los delegados de una misma corporación votaron en el mismo sentido, produciéndose un baile de votos que trastocó los planes previstos de algunos candidatos.
Calendario actual
Formalmente, las elecciones fueron convocadas el pasado 1 de septiembre. Hasta el próximo 12 de septiembre está abierto el plazo para la presentación de las candidaturas, por lo que las dos personas que optan al cargo (José Carlos Garín y María del Carmen Ledesma) todavía tienen cinco días para conseguir los 14 avales mínimos requeridos. En principio Garín contaría con 21 firmas sobre el papel, mientras que Ledesma asegura contar con 19 apoyos.
Una vez que esto se produzca, y siempre y cuando reúnan los requisitos establecidos, serán remitidas al Obispado el 13 de septiembre, teniendo hasta el 17 para aceptarlas o rechazarlas. Tras los comicios del día 2, se remitirá a Palacio para su ratificación.
Desde el momento de convocatoria de elecciones, el presidente y los cargos generales de la Agrupación, quedan en funciones hasta que se produzca la toma de posición de la nueva Junta de Gobierno.