Málaga ya es, oficialmente, sede para el Mundial de fútbol que tendrá lugar en España, Portugal y Marruecos en 2030. Estaba cerrado desde hace unas semanas, pero solo faltaba la confirmación de la Real Federación Española de Fútbol y se ha producido este viernes. 

Nueve ciudades españolas acogerán partidos del Mundial entre las que se encuentran Madrid (Bernabéu y Metropolitano), Barcelona (Camp Nou y Cornellá), Bilbao (San Mamés)La Coruña (Riazor), San Sebastián (Anoeta), Zaragoza (La Romareda), Sevilla (Cartuja), Gran Canaria (Las Palmas)y Málaga (La Rosaleda).

"Para definir las sedes, se han aplicado una serie de baremos y criterios objetivos, en línea con lo establecido en los requisitos de candidatura de la FIFA. En total, se han definido 11 estadios, elegidos en una evaluación que ha tenido en cuenta aspectos como el proyecto técnico, operatividad, estructura financiera y dotación de las ciudades sedes, además del cumplimiento de los requisitos documentales y contractuales", han explicado desde la RFEF.

Por otra parte se han elegido 45 subsedes a lo largo de toda España. En el caso concreto de Málaga son el Estepona Football Center y el Marbella Football Center.

Esta es la propuesta que enviará la RFEF a la FIFA -tenía que hacerlo antes del 31 de julio- y será ahora el máximo organismo del fútbol mundial el que tendrá que confirmarla. El 11 de diciembre, en asamblea general, ratificará la candidatura conjunta de España, Portugal y Marruecos y, posteriormente, las sedes definitivas. A los 11 estadios de España se le sumarán 6 de Marruecos y 3 de Portugal. 

Segundo Mundial en Málaga e importante inversión

La Rosaleda ya acogió partidos del Mundial que organizó España en 1982. Fue una primera fase con Escocia, la Unión Soviética y Nueva Zelanda.  Los resultados fueron Escocia-Nueva Zelanda (5-2), Unión Soviética-Nueva Zelanda (3-0), y Unión Soviética-Escocia (2-2).

El estadio de La Rosaleda tendrá que ser sometido a una fuerte remodelación para cumplir las exigencias de la FIFA y, además, ser moderno. La inversión rondará los 300 millones de euros, una cantidad importante que tendrá que ser sufragada por los propietarios del campo -Ayuntamiento, Junta de Andalucía y Diputación de Málaga- y se quiere captar a inversores privados. 

El proyecto, diseñado por el estudio de arquitectura Morph, es muy ambicioso. Sería tener un campo completamente nuevo con capacidad para 45.000 espectadores, así como zonas de ocio, restauración y hasta un hotel. 

También se plantea la posibilidad de instalar un césped que pueda esconderse para no dañarlo a la hora de hacer otro tipo de espectáculos y un techo retráctil, siguiendo la fórmula que se ha llevado a cabo, por ejemplo, con el Santiago Bernabéu en Madrid.