El Málaga CF ha recibido en las últimas horas una noticia que supone un duro palo para la entidad blanquiazul. La FIFA ha sancionado a los de Martiricos sin poder acudir al mercado de fichajes hasta el verano de 2023 por no corresponderle al portero Cenk Gonen con más de 800.000 euros por la desvinculación del jugador turco en el verano de 2019, según ha adelantado Marca.
Fuentes del club de Martiricos han indicado a EL ESPAÑOL de Málaga que su idea es pagar para poder fichar en esas ventanas de mercado y, si es posible, recurrir la sanción al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS, por sus siglas en francés).
"Otro 'éxito' de los anteriores directivos", lo han calificado esas mismas fuentes, que han confirmado que la FIFA envió la notificación a un correo erróneo y no a los oficiales del club.
El guardameta Cenk Gonen recaló en la Costa del Sol en el período estival de 2017 como "recambio" de Kameni que abandonaba en ese intercambio el club y donde los dirigentes se ahorraban la importante ficha del camerunés. El portero turco en ningún momento llegó a defender la camiseta malaguista en un partido oficial en los años que estuvo formando parte de la entidad.
El jugador le reclamó al club esa alta cifra de dinero, en el Málaga CF se negaron a pagarla y ahora es la FIFA la que sanciona al club por ello. Según han informado en distintos medios, en la entidad existe cierta "relajación" porque en ningún momento recibieron una notificación en el correo oficial. De ahí que desde los despachos se vaya a apelar dicha sanción y, ante la negativa, también se recurriría al TAS. Sin embargo, esta nueva decisión podría prolongarse en el tiempo y podría continuar sin respuesta hasta el inicio de enero.
No obstante, esta noticia llega en uno de los peores momentos, ya que la idea de recurrir al mercado de fichajes en invierno sobrevolaba los despachos malaguistas. La numerosas bajas que el equipo acumula, especialmente en el centro del campo, y la bajada de rendimiento en estas últimas jornadas tendrán que superarse, por el momento, sin poder tener nuevas caras