Antoñito Cordero durante un partido.

Antoñito Cordero durante un partido. La Liga

Málaga C.F.

La Rosaleda destapa el ‘caso Antoñito Cordero’

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Estaba guardado en un bote que se estaba agitando desde las partes interesadas, unas más que otras, en los últimos días. Hasta que se destapó este sábado en La Rosaleda en torno al minuto 80 de partido. Es el 'caso Antoñito Cordero', que a cuenta de la no renovación con el Málaga CF del jugador jerezano, derivó en una pitada cuando entró al campo y cada vez que tocó el balón, aunque los pitos se fueron sofocando con aplausos. 

Sin ánimos de ser exhautivos, los hechos son los siguientes:

Antonio Cordero recogió un balón suelto en el área el pasado 22 de junio cuando se cumplía el minuto 122 en el Nou Stadi de Tarragona para poner el 2-2 en el marcador y desatar un éxtasis apenas recordado en la ciudad con el ascenso a Segunda División. Ese día, Cordero se convirtió en leyenda del club. 

Antoñito Cordero finaliza contrato con el Málaga CF el próximo 30 de junio de 2025. 

En mitad de la carrera, Cordero cambió de representante para ponerse en manos de Pini Zahavi. 

Al final del mercado veraniego, el Málaga CF rechazó una oferta del FC Barcelona para hacerse con los servicios de Cordero y contar con él para jugar en el filial blaugrana. 

Loren Juarros, director deportivo del Málaga CF, lleva desde el verano intentando abordar la renovación del canterano sin éxito. 

Antoñito Cordero empezó la temporada como un cohete anotando tres goles y dando otras tantas asistencias, manteniéndose a día de hoy como en el pichichi del equipo de Sergio Pellicer. 

Desde el club se filtra que desde el entorno de Antoñito Cordero ni siquiera se escucha la oferta que le quiere hacer el Málaga al futbolista. Después se reconoce que sí se escuchó la primera oferta, lejos de las pretensiones del entorno del fútbolista. 

La información corre como la pólvora en la última semana y desemboca en una pitada sorprendente cuando Cordero sustituyó a Kevin en el minuto 79' del Málaga vs. Cartagena. Los pitos arreciaban cada vez que el canterano entraba en contaco con la pelota. A medid que fue interviniendo más, un sector de la afición transformó los pitos en aplausos generando un ambiente extraño en el estadio cuando el equipo no había cerrado el partido. 

Así las cosas, en el Málaga ahora se abre un problema con el que hasta ahora está siendo su mejor jugador sobre el césped junto con Alfonso Herrero. 

¿Qué gana el malaguismo pitando a un futbolista que no cumplirá los 18 años hasta esta misma semana?

¿Se saca algún tipo de ventaja chiflando a un jugador de tu equipo, de los más peligrosos si no el que más, cuando tiene la pelota en los pies?

¿No tiene acaso Cordero derecho a rechazar al Málaga, un club atado de pies y manos hoy en día, por cualquier oferta muy superior que a buen seguro le llegará?

¿No hay nadie a los mandos en todo este asunto? Los canteranos están prácticamente blindados en el Málaga. No dan entrevistas ni comparecen ante la prensa.

¿Dará el club alguna explicación pública para dar a conocer las versión oficial de la institución?

¿Tampoco hay nadie en el entorno del jugador que se atreva a dar la cara para decir abiertamente que el jugador no va a renovar con el Málaga?

Puede que sea el momento de que se pongan luz y taquígrafos en este asunto para atajar el ambiente que se despertó el sábado en La Rosaleda contra el que, hasta día de hoy, no es que sea su mejor jugador, al menos el más determinante, sino que ya nunca jamás nadie podrá quitarle la etiqueta de leyenda del Málaga Club de Fútbol.